Efectos del «bloqueo» en el sistema sanitario de Cuba (I)

Este escrito no trata de medicina aunque en él se hable de medicamentos, tampoco de psicoanálisis, aunque se refiera a «perversiones». Las perversiones mediante las cuales la mal llamada «comunidad internacional» se relaciona con aquellos países que considera que no pertenecen a ella.



Luego de una emotiva estancia en Cuba, de aprendizaje y cálida acogida en centros hospitalarios y universitarios, unos meses en La Habana y un par de semanas en la ciudad de Holguín, es momento de sentarme, reflexionar e intentar asimilar todo lo que he vivido durante este tiempo en la mayor de las Antillas.

Es sencillo encontrar artículos de prensa, textos académicos y tesis doctorales fruto de rigurosas investigaciones, con datos precisos sobre los efectos del bloqueo en el sistema de salud cubano. La mayoría bien documentados otros no tanto, muchos tendenciosos y otros parciales.

Se pueden encontrar muchos trabajos escritos con rigor histórico, pero de difícil acceso según en qué país nos localicemos por las restricciones a las que están sometidos los sitios de internet cubanos. También podemos encontrar textos cuyo valor se limita a expresar legítima indignación personal del autor ante uno de los hechos más infames del siglo pasado y el actual.

Por tanto, estas líneas no aportarán mucho a los trabajos existentes más que el acto de permitirme compartir una vivencia personal reciente en Cuba. Por tanto, para ampliar detalles y datos que considero necesarios que puedan a ayudar a entender la compleja situación cubana, intentaré apuntar algunas referencias que considero tienen como objeto ser más exhaustivas.

El bloqueo económico, comercial y financiero impuesto por EE. UU. a Cuba

La República de Cuba tiene una extensión casi similar a la de Inglaterra. Con 109.884 km² de superficie, 5.776 km de línea de costa y 28,5 km de frontera con EE.UU., frente a los 130.279 km² que ocupa Inglaterra, y una longitud de costa aproximada de 2.400 km., la isla tiene una superficie que alcanza el 84,34% de la del territorio inglés.

Bien sabido es que Cuba está sometida a un bloqueo económico, comercial, financiero y social por parte de EE.UU. desde el año 1959. En salvar los obstáculos que ocasiona, el Estado y el pueblo cubano dedican la mayoría de sus energías y de su tiempo diarios. Energías y tiempo humano que otros estados y otros pueblos no necesitan perder.

En la mayoría de los países que participan del bloqueo impuesto por los EE.UU., incluso rechazándolo en los foros internacionales, sus ciudadanos para adquirir una docena de huevos, un antibiótico, una jeringuilla o un litro de leche, no tienen que dedicar más de media hora de espera en un comercio y unos 10 minutos de tiempo de trabajo traducido a salario efectivo. En Cuba eso no es así. Un europeo puede imaginar o recordar hechos similares en los periodos de guerra y postguerra, como la primera, la segunda o la guerra civil en España con las cartillas de racionamiento. Quizá también los ciudadanos de EE.UU. sufrieron algo similar a finales de los años 30, durante un período de tiempo más corto. Aunque actualmente en muchas de las calles de grandes ciudades estadounidense, pueden observarse masas intoxicadas deambulando en situaciones desesperadas en busca de la muerte, pero en este caso como consecuencia de la epidemia de drogas químicas con una precaria  asistencia social y sanitaria. Es sabido que aquella persona que no dispone de un seguro médico privado en el país del norte tiene muy complicado el acceso a servicios asistenciales básicos.

Tras el derrumbe de la URSS a principios de los años noventa Cuba padeció la pérdida dramática de un estado aliado que cooperaba y con el que mantenía vínculos comerciales igualitarios, así como relaciones de intercambio industrial, tecnológico, cultural y educativo. Pero en ese crucial momento occidente recrudeció las sanciones a las que venía siendo sometida desde 1959, justo cuando más colaboración y solidaridad necesitaba la isla.

Consecuencia de todo ello, junto quizá a una falta de previsión por parte del estado cubano que tenía casi todas las fichas puestas en la misma mesa, el país desembocó en el llamado «período especial», que tuve la circunstancia de conocer de primera mano durante una visita que hice en marzo y abril de 1992. Aunque hace años de aquello creo que la situación actual es mucho más dramática, pese a que ahora hay más cantidad de productos básicos disponibles en tiendas estatales y pequeños y medianos comercios de gestión privada [Mipymes], la mayoría son importados y de muy difícil adquisición para la población en general, debido al alto precio de los mismos a causa de la especulación inflacionaria por parte de intermediarios sin escrúpulos, tanto externos como internos. Los productos que pueden encontrarse van desde electrodomésticos —insistimos a precios de mercado occidental, muchos provenientes de EE.UU.— alimentos envasados, congelados, bebidas con y sin alcohol, pero no es posible encontrar medicamentos en las tiendas. Este es uno de los efectos más dramáticos del bloqueo.

El modelo sanitario cubano es de carácter socialista, es decir, la salud de la población es un derecho público y universal cuya responsabilidad es del Estado. Este modelo se implantó tras el triunfo de la revolución en 1959, al igual que el del sistema educativo, que obviamente, como todas las estructuras de la sociedad cubana, también padece de los efectos del «embargo».

El bloqueo es una sofisticada y habitual artimaña perversa occidental que busca provocar el desengaño y desaliento de los pueblos con sus propios gobiernos, es decir, con aquellos gobiernos que no se someten a los intereses de occidente. En el caso cubano se busca el desencanto con la revolución, a través de la insatisfacción económica y la penuria cotidiana, esperando con ello la caída del gobierno por la falta de apoyo o por una implosión social. Otro efecto buscado por el bloqueo, más perverso si cabe, es tener como ejemplo propagandístico por parte de EE.UU., en este caso a Cuba, como una muestra del fracaso de una revolución socialista.

A la difícil situación hay que sumarle una serie de fenómenos naturales que se producen periódicamente en la isla con efectos devastadores como el reciente huracán «Ián» de septiembre de 2022, así como la pandemia del COVID-19 declarada en 2020.

Las leyes «Torricelli» y «Helms-Burton»

El 7 de febrero de 1962 el gobierno de John F. Kennedy NOTAS [1. ACNU. Asociación Cubana de las Naciones Unidas. «Un día como hoy el presidente Kennedy firmó el bloqueo de Estados Unidos a Cuba». En línea: http://www.acnu.org.cu/articulos/un-dia-como-hoy-el-presidente-kennedy-firmo-el-bloqueo-de-estados-unidos-cuba] [2. Discover U.S. Government Information. «Proclamation 3447: Embargo on all trade with Cuba. By the President of the United States of America». National Security Archive. Gelman Library The George Washington University, 3 de feb de 1962. En línea: https://nsarchive.gwu.edu/document/27405-document-6-federal-register-proclamation-3447-embargo-all-trade-cuba-february-3-1962] firmó una orden ejecutiva que formalizó y consolidó el «embargo» económico, comercial y financiero contra Cuba, con el objeto explícito en la disposición de buscar la asfixia económica y el aislamiento político regional e internacional de la isla.

Décadas más tarde durante la administración de George Bush (padre) el 23 de octubre de 1992 el Congreso norteamericano sancionó la llamada «Ley para la democracia en Cuba» conocida como «Ley Torricelli», NOTAS [3. Amnesty International Publications. «El embargo estadounidense contra Cuba. Su impacto en los derechos económicos y sociales». Corte Internacional de Derechos Humanos, septiembre de 2009. En línea: https://www.corteidh.or.cr/tablas/r25238.pdf] [4. Senate and House of Representatives of the United States of America. «Cuban Democracy Act of 1992». Discover U.S. Government Information, 23 de octubre de 1992. En línea: https://www.govinfo.gov/content/pkg/STATUTE-106/pdf/STATUTE-106-Pg2315.pdf] endureciendo las disposiciones vigentes dándoles mayor alcance extraterritorial.

Esta ley, que se sumó a la «Enmienda Mack» de 1989, NOTA [5. Bell, Jason S. «Violation of International Law and Doomed U.S. Policy: An Analysis of the Cuban Democracy Act». University of Miami Law School Institutional Repository, 10 de enero de 1991. En línea: https://repository.law.miami.edu/cgi/viewcontent.cgi?referer=&httpsredir=1&article=1414&context=umialr] estableció dos sanciones aún más duras si cabe:

■■ Por un lado, prohíbe el comercio con Cuba de empresas subsidiarios de EE.UU. establecidas en terceros países;

■■ Por otro, prohíbe a los barcos que entren a puertos cubanos, con propósitos comerciales, tocar puertos de Estados Unidos o en sus posesiones durante los 180 días siguientes a la fecha de haber abandonado el puerto cubano. NOTA [6. Prensa Latina. «Leyes Torricelli y Helms-Burton, «perlas» del bloqueo contra Cuba». 17 de agosto de 2021. En línea: https://www.prensa-latina.cu/2021/08/17/leyes-torricelli-y-helms-burton-perlas-del-bloqueo-contra-cuba]

Posteriormente se promulgó el 3 de marzo de 1996 la «Ley Helms Burton» que firmó y puso en vigor el presidente Bill Clinton el día 12 de marzo siguiente, que se sumó a la orden 12854 del 4 de julio de 1993 que también firmó Clinton. Mediante estas leyes EE. UU. se adjudica el derecho de llevar a sus tribunales a aquellos que inviertan, sin su autorización, en Cuba en propiedades o empresas que supuestamente pertenecen a ciudadanos norteamericanos. NOTA [7. Instituto Cubano de Amistad con los Pueblos. «Ley para la libertad y la solidaridad democrática cubanas (Ley Libertad -«Helms-Burton»)». 28 de octubre de 2007. En línea: https://web.archive.org/web/20071028145504/http://www.icap.cu/medidas/hb_sintesis.html]

Sabemos del alcance de las medidas que toman los tribunales norteamericanos, atribuyéndose el poder de poder sancionar fuera de su jurisdicción territorial como acaba de ocurrir con una sentencia que decretó una sanción de 16.000 millones de dólares al estado argentino, a favor de un fondo privado por la expropiación legítima de una empresa petrolífera nacional. NOTA [8. Diario Página|12. «Expropiación de YPF: un fallo a favor de los buitres». 9 de septiembre de 2023. En línea: https://www.pagina12.com.ar/586366-expropiacion-de-ypf-un-fallo-a-favor-de-los-buitres]

Algunos efectos de las sanciones

A causa del bloqueo, Cuba se ve imposibilitada de adquirir tecnologías, materias primas, reactivos médicos, instrumentos diagnósticos, medicamentos, dispositivos, equipos y piezas de repuesto. Esta situación obliga a las empresas cubanas a adquirirlos a través de terceros países, con el consiguiente encarecimiento del costo debido la intermediación mercantil. NOTA [9. Marimón Torres, N. y Torres Martínez, Esther. «Efectos del bloqueo económico, financiero y comercial de Estados Unidos en el Sistema Nacional de Salud». En línea: https://revsaludpublica.sld.cu/index.php/spu/article/view/127] La población padece la escasez de medicamentos así como de material desechable imprescindible para la atención médica en los centros sanitarios. NOTA [10. Ministerio de Salud Pública. República de Cuba. «Bloqueo estadounidense provoca cuantiosas pérdidas al sector de la salud». 5 de mayo de 2021. En línea: https://salud.msp.gob.cu/bloqueo-estadounidense-provoca-cuantiosas-perdidas-al-sector-de-la-salud/] Las empresas extranjeras productoras de equipos de alta tecnología para la atención cardiológica, quirúrgica, etc. no suministran equipos médicos ni repuestos para reparar los existentes, aduciendo que los dispositivos poseen componentes estadounidenses.

Crisis alimentaria

La crisis alimentaria, probablemente más dura y cruel que durante la del período especial de los años noventa, está en línea con las propuestas que en 1960 el funcionario del Departamento de Estado Lestor Mallory consideró indispensables para «que conduzcan al hambre, la desesperación y el derrocamiento del gobierno.» NOTAS [11. Office of the Historian. «Memorandum From the Deputy Assistant Secretary of State for Inter-American Affairs (Mallory) to the Assistant Secretary of State for Inter-American Affairs (Rubottom)». Foreign Relations of the United States, 1958–1960, Cuba, Volume VI, 6 de abril de 1960. En línea: https://history.state.gov/historicaldocuments/frus1958-60v06/d499] [12. Prensa Latina. «Cuba condena vigencia del Memorando Mallory, fundamento del bloqueo». 6 de abril de 2023. En línea: https://www.prensa-latina.cu/2023/04/06/cuba-condena-vigencia-del-memorando-mallory-fundamento-del-bloqueo].

Señala Frei Betto, que «la escasez actual es más grave que en el Periodo Especial (1990-1995)», NOTA [13. Poch de Feliu, Rafael. «El empeoramiento de la crisis alimentaria en Cuba significa que el bloqueo de EE.UU. debe terminar ahora». 3 de septiembre de 2023. En línea: https://rafaelpoch.com/2023/09/03/el-empeoramiento-de-la-crisis-alimentaria-en-cuba-significa-que-el-bloqueo-de-ee-uu-debe-terminar-ahora/] teniendo que importar hasta el 80% de los alimentos que consume, frente al 70% de hace unos cinco años, que cuesta 4.000 millones de dólares anuales, frente a 2.000 millones. Sólo en el caso del maíz, la soja y el arroz, el gasto asciende ahora a 1.500 millones de dólares anuales. NOTA [14. Betto, Frei. «Entender la crisis cubana (Entenda a Crise Cubana)». 4 de julio de 2023. En línea: https://www.freibetto.org/entenda-a-crise-cubana/]

El bloqueo económico, comercial y financiero de los EE. UU. contra Cuba busca provocar desencanto, y el descontento popular que provoque la caída del gobierno. Por si fuera poco, a estas medidas se añadió el 12 de enero de 2021, al final del gobierno de Donald Trump, declarar a Cuba nación patrocinadora del terrorismo, lista que incluye a Corea del Norte, Irán y Siria. NOTAS [15. Whitney, W.T. «El empeoramiento de la crisis alimentaria en Cuba significa que el bloqueo de EE.UU. debe terminar ahora». Blog personal de Rafael Poch de Feliu, 3 de septiembre de 2023. En línea: https://rafaelpoch.com/2023/09/03/el-empeoramiento-de-la-crisis-alimentaria-en-cuba-significa-que-el-bloqueo-de-ee-uu-debe-terminar-ahora/] [16. U.S. Deparment of State. «State Sponsors of Terrorism». Bureau of counterterrorism. En línea: https://www.state.gov/state-sponsors-of-terrorism/]

«Rogues States»: Los estados canallas

La lista de países terroristas que confecciona EE.UU. está en la línea con la categoría «rogue State», países canallas, término que acuñó quien fuera Consejero de Seguridad de EE.UU., y actualmente Director Ejecutivo de UNICEF, Anthony K. Lake en un artículo de 1994 en Foreign Affairs. En dicho artículo Lake describió a Irán, Irak, Libia, Corea del Norte y Cuba como «estados rebeldes», desde entonces el presidente Bill Clinton y miembros del Congreso adoptaron dicha categoría para señalar la amenaza que representan estos estados para los intereses estadounidenses. Noam Chomsky ha dedicado un libro al respecto, con «una información rica, apabullante y en general poco utilizada o mediatizada, contra la política americana en el mundo». NOTAS [17. Derrida, Jacques. «(No) más Estados Canallas», en Canallas. Dos ensayos sobre la razón, Madrid: Trotta, 2005, pp. 119-135] [18. Chomsky, Noam. Estados Canallas. El imperio de la fuerza en los asuntos mundiales, Barcelona: Paidós]

La emigración cubana un problema capital

La escasez y dificultades para la población cubana incide directamente en la constante emigración NOTA [19. McKelvey, Charles. «Cuba and the Cuban emigration». 26 sept 2023. En línea: https://charlesmckelvey.substack.com/p/cuba-and-the-cuban-emigration?utm_source=profile&utm_medium=reader2] que debilita al país, por la salida de trabajadores, muchos de ellos especializados y jóvenes universitarios. La pérdida de mano de obra es quizá uno de los problemas que más dificultan la vida cotidiana y la producción de bienes en Cuba, algo que se manifiesta de forma alarmante en la población rural. A esto se agrega la dificultad para importar semillas, fertilizantes, pesticidas, productos veterinarios que dificultan enormemente la producción agrícola.

Reponer una máquina sólo requiere un préstamo o donación de algún estado o entidad extranjera. Pero formar un profesional sanitario, un técnico, un trabajador de hostelería, un obrero especializado, etc. lleva años de inversión de tiempo y dinero. De estos trabajadores, hombres y mujeres, se benefician sin duda alguna los países que obtienen un trabajador cualificado sin haber invertido en su formación, tan solo deben limitarse a concederles un permiso de trabajo y residencia. Aquí no pretendo poner en cuestión la emigración. El mundo, nuestra «civilización» se basa y depende de ella.

Todo ser humano tiene el legítimo derecho de buscar un lugar donde su trabajo y condiciones le permitan una existencia mejor. De hecho Cuba recibe las indispensables remesas y envíos de mercancías básicas que envían quienes han podido emigrar y conseguir un trabajo o empleo, en condiciones precarias en muchos casos, en EE.UU. o en Europa. Yo mismo he emigrado de mi tierra. Sólo me refiero a la hipócrita «ayuda» de los mismos países occidentales que asfixian, ya no solo a Cuba, sino a muchos otros países de América y África obteniendo como beneficio mano de obra a menor costo.

Repercusiones del bloqueo en el sistema de salud

En el contexto de la pandemia las sanciones incrementaron la persecución a las transacciones de Cuba, lo que dificultó el pago a proveedores y incluso la recepción de donaciones internacionales. Por ello empresas como Sartorious, Merck y Cytiva se negaron a continuar como proveedores de material de laboratorio, reactivos e insumos.

Como ejemplo, un informe detallado que realizaron profesores de la Facultad de Ciencias Médicas de La Habana «Victoria de Girón», señala que el Cardiocentro Pediátrico «William Soler» carece del levosimendán, fármaco empleado en el tratamiento del bajo gasto cardiaco y que solamente es producido por los laboratorios Abbott de los EE. UU. Del mismo modo, los neurolépticos para el control de los síntomas psíquicos son de difícil adquisición en el mercado farmacéutico. NOTA [20. Ruiz-González, L., Piñera-Castro, H., & Smith-Groba, J. «Impacto del bloqueo estadounidense sobre el sistema cubano de salud en la última década». Revista Cubana de Medicina Militar, 52(1). En línea: https://revmedmilitar.sld.cu/index.php/mil/article/view/2469/1736]

Para paliar mínimamente estos obstáculos el gobierno cubano aprobó una serie de medidas que permiten temporalmente la importación sin carácter comercial, sin límites en su valor y exenta del pago del Impuesto aduanero de alimentos, aseo, medicamentos e insumos médicos, por la vía de pasajeros como equipaje acompañado. NOTA [21. Gaceta Oficial de la República de Cuba. Ministerio de Justicia. «Resolución 133 de 2023 de Ministerio de Finanzas y Precios». 29 de junio de 2023. En línea: https://www.gacetaoficial.gob.cu/es/gaceta-oficial-no-47-extraordinaria-de-2023]

Europa es un «jardín»… el resto una «jungla»

En una visita reciente a La Habana en mayo de 2023, el Alto Representante de la Unión Europea para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad y Vicepresidente de la Comisión Europea —así se denominan los cargos que ocupa—, Josep Borrell, manifestó sin rubor alguno estar seguro «(…) de que Cuba acabará siendo la Mallorca del Caribe», haciendo alusión a la isla española cuyo fuente de sustento se limita al turismo. El mismo que unos días antes espetó que Europa es un «jardín» y el resto del mundo una «jungla». Es de agradecer la sinceridad del gestor político —imputado por uso de información privilegiada en España por venta de acciones de una empresa en quiebra—y transparencia para comunicar la mirada que la «comunidad internacional» tiene de los países que no pertenecen a ella y su preferencia para que limiten a ser «garitos», como decía Carlos Puebla.

La independencia, decía José Martí, es condición de esencia de la vida y las revoluciones son como el café: han de hacerse con agua hirviendo… NOTA [22. Valdés Galarraga, Ramiro. Diccionario del Pensamiento Martiniano. La Habana: Editorial de Ciencias Sociales, 2002, p.311; 607]


La perversión de la mal llamada «comunidad internacional» (II)





«Psicología de masas del fascismo»: Nueva edición actualizada

La «gran depresión capitalista» de los años treinta en Europa podía presagiar una revuelta social protagonizada por las organizaciones obreras y sindicales y por los partidos de izquierda. 

Pero por el contrario, con el apoyo popular se produjo el ascenso, inspirada en el fascismo italiano, de la extrema derecha en Alemania en las elecciones de julio y de noviembre de 1932, consolidándose el NSDAP —Partido Nacionalsocialista Obrero Alemán— como primera fuerza política. A consecuencia de esto, el 30 de enero de 1933 Hitler es nombrado canciller imperial. Estos resultados electorales le permiten a Reich comprobar cómo la situación social y económica de las masas no se reflejan necesariamente en la conciencia social de los trabajadores.



Por qué la mayoría acepta la explotación y se sumerge en la empresa de satisfacer deseos impuestos por la clase que la domina entregándose de lleno al matadero del capitalismo? Si las condiciones sociales y económicas «objetivas» están dadas para que se produzca una revuelta, ¿qué estructura caracterológica en los sujetos lo impide?

«Ya hemos visto que las situaciones económica e ideológica de las masas no tienen por qué coincidir y que incluso puede haber entre ellas una divergencia notable. La situación económica no se traslada inmediata y directamente a la conciencia política; si ello fuera así, la revolución social se habría realizado hace mucho tiempo».

Wilhelm Reich —mediante un riguroso uso de las herramientas epistemológicas que la sociología sexoeconómica, la antropología, el psicoanálisis, el materialismo dialéctico y el análisis del carácter le brindan— analiza dicha contradicción, esa brecha existente en la «conciencia» de las masas entre la realidad material y la realidad percibida, entre la realidad social y económica de explotación y represión y la conciencia efectiva que de ella se tiene, contradicción que requiere un urgente esclarecimiento, puesto que en lugar de desvanecerse, manifiesta su insistencia en solidificarse.

En las páginas de «Psicología de masas del fascismo», un libro clásico publicado en 1933, y ahora disponible en una edición completa, Reich nos da claves para afrontar la tarea.


Wilhelm Reich nació en Dobrzcynica, Galitzia, el 24 de marzo de 1897. En 1915 se incorpora al ejército austríaco combatiendo en el frente italiano en la Primera Guerra; al finalizar ésta se traslada a Viena e ingresa en la Facultad de Medicina. En 1919 entra en contacto con el psicoanálisis y, en 1920 avalado por Freud, es admitido como miembro en la Sociedad Psicoanalítica, siendo nombrado director del Seminario de técnica psicoanalítica en 1924. En 1930 se marcha a Berlín donde crea centros gratuitos de sexología e higiene mental. Tras el ascenso de Hitler se exilia en Dinamarca, Suecia y Noruega. Apartado del Partido Comunista y de la Sociedad Psicoanalítica, en 1939 emigra a EE. UU. En 1947 la FDA (Administración de Alimentos y Medicamentos) abre una investigación sobre sus actividades que concluye en una condena de dos años de prisión. El 3 de noviembre de 1957 fallece en la penitenciaría federal de Lewisburg, Pensilvania.




El amargo desencanto de las masas (I)

El líder «libertario»: síntoma de la amnesia social

Los resultados de las elecciones «Primarias Abiertas, Simultáneas y Obligatorias» (PASO) celebradas este 13 de agosto en la Argentina han supuesto un terremoto político debido al triunfo de una derecha extrema, indescifrable por los grotescos y apabullantes mensajes que emite su líder a una población agobiada por una situación económica y social cada vez más decadente.



No descubriremos nada si afirmamos que lo sucedido no es un fenómeno exclusivo de la Argentina. En absoluto. Un manto de mediocridad, desinformación y grosería que emana desde los medios de comunicación y las instituciones cubre a occidente desde hace décadas a ambos lados del Atlántico, creando las condiciones que posibilitan la emergencia de conglomerados políticos sin historia aparente que finalmente reciben el apoyo de los confusos electores frente a los partidos tradicionales enredados en contiendas internas, luchas de poder, políticas ambiguas cuando gobiernan o directamente contrarias al bien de los ciudadanos y del «pueblo» que dicen representar.

Gran parte del pueblo trabajador termina eligiendo en contra de sus propios intereses de clase, como ya ocurriera en otros momentos del siglo pasado y del presente. Ocurrió en Alemania en 1933, en la Italia de los años noventa, periódicamente en la España ambigua, monárquica y parlamentaria a la vez, en el Brasil que derrumbó al partido que más allá de sus deficiencias y limitaciones se ocupó de las clases obreras y las marginales, dando paso por mandato popular a un candidato que en la brevedad de su mandato mostró su verdadero rostro. Los ejemplos ocuparían la mayor parte de este espacio.

Así como sucedió hace pocos años en Brasil, como hemos señalado, con la derrota del Partido dos Trabalhadores (PT) de Luiz Inácio Lula da Silva «Lula» y Dilma Rousseff frente a Jair Bolsonaro, llevar a cabo una política para erradicar la pobreza y dar un poco de oxigeno a las clases más desfavorecidas, no garantizó al PT el apoyo en las urnas, pero de lo que no parece haber duda es que aplicando una política neoliberal maquillada de «social» se facilita la derrota de un gobierno «populista de izquierdas». Esto lo digo sin resonancias irónicas, me limito a tomar la terminología establecida por sectores de la izquierda argentina seguidora de Ernesto Laclau.

Los ejemplos donde un pueblo elige a un representante contrario a sus propios intereses de clase abundan.

Las «PASO», un invento argentino

En ningún país del mundo, que sepa, es obligatorio para los ciudadanos concurrir a elecciones internas partidarias para elegir los candidatos finales a las presidenciales. Las PASO son un invento argentino. La ley que las implementó se dictó en 2009, siendo el año 2011 el primero en que se llevaron a cabo.

El proceso consiste en que cada agrupación política selecciona sus candidatos y los postula al electorado, que puede votar al que considere, independientemente del partido al que represente. Si en un partido sólo hay un postulante no habrá elección interna, ya que ese será el candidato final a las presidenciales, pero aún así participa en las PASO.

En estas últimas celebradas el 13 de agosto dos de las agrupaciones políticas más votadas presentaron sendos candidatos cada una:

  • El oficialismo, que responde al peronismo, presentó dos candidatos con la agrupación Unión por la Patria y obtuvo sumando los votos de ambos el 27,27%.

  • La oposición Juntos por el Cambio, que responde al anterior presidente Mauricio Macri, obtuvo (28,27%) sumando los votos de sus dos candidatos.

  • La tercera agrupación La Libertad Avanza, que terminó siendo contra pronóstico la más votada con el 30,04%, presentó un único candidato, el «libertario» Javier Milei.

Un ejemplo de esta singular situación electoral es el siguiente. Un partido de orientación trotskista, el Frente de Izquierda y de Trabajadores-Unidad (FIT), tal es su nombre, sumando sus dos candidatos obtuvo el 2,65%, por tanto no pasó el corte para presentarse a las presidenciales de octubre.

Esto parece indicar que el sistema beneficia a espacios que afrontan las elecciones con candidaturas únicas, que de ese modo no dividen los votos, como ha sido el caso de La Libertad Avanza, frente a los grupos que compiten internamente. Quizá habría que agregar el efecto de unidad —al menos aparente— que muestra dicha agrupación frente al electorado, sin el desgaste con el que llegan las otras que llevan a las PASO a dirimir en público sus diferencias, en lugar de hacerlo en sus órganos internos, con la saturación de campañas, propaganda, medios económicos que eso conlleva, así como la inevitable parálisis parlamentaria, puesto que la mayoría de los precandidatos ocupan cargos legislativos y gubernamentales.

Otro detalle. Las PASO aun siendo obligatorias, registraron en 2019 una participación ciudadana del 76,4%, y en la de agosto de 2023 bajó al 69%. Quizá este modelo electoral debería ser revisado, si es que la representación parlamentaria de organizaciones políticas más cercana a los intereses del pueblo le alcanza para hacerlo.

Su majestad el FMI.: al fondo a la derecha

Si el candidato triunfante de estas elecciones expresa abiertamente propuestas como mínimo inquietantes para los intereses del país y de la clase trabajadora de lo que no cabe duda, al menos para el que escribe, es que es un emergente, un síntoma social de una situación de decadencia que la Argentina viene construyendo ladrillo sobre ladrillo desde hace décadas.

En esa línea la reacción del gobierno actual luego del batacazo electoral fue devaluar la moneda nacional un 20% y pedir una reunión con el FMI (Fondo Monetario Internacional) que en el momento de escribir este breve texto se está llevando a cabo en su sede en 19th Street, N.W. Washington, D.C., EE.UU., entre el Ministro de Economía y candidato a la vez del oficialismo Sergio Massa y la directora de tal solícito organismo, Kristalina Georgieva, que haciendo honor a su nombre de pila con total transparencia exige al ambivalente ministro-candidato entre otras cuestiones tal como publica el diario Página|12 «(…) la necesidad de no incrementar el gasto público en jubilaciones y salarios de empleados del Estado, ordenó no aflojar con la eliminación de subsidios y mantener a raya la expansión monetaria. Pero además, ya puso el ojo sobre el escenario poselectoral, al pedir que se desactiven los controles cambiarios, aplicar «reformas estructurales» en el sistema previsional y en las empresas públicas.» [1. «El FMI mete presión sobre el gasto público y ya le apunta al escenario poselectoral», Diario Página|12. 26 de agosto de 2023: https://www.pagina12.com.ar/582245-el-fmi-mete-presion-sobre-el-gasto-publico-y-ya-le-apunta-al].

Cumplir estas exigencias permitirá al país recibir «el desembolso de 7500 millones de dólares en favor de las reservas del Banco Central —el mismo que Javier Milei propone disolver. Aquí surge un interrogante, si se disuelve tal como propone el «libertario» el Banco Central ¿quien respondería por la deuda contraída?—, lo cual alivia el escenario financiero hasta fin de año.

El FMI, continua la nota de Página|12, estima que «la inflación del año cerrará en el 120 por ciento anual y que el PBI caerá un 2,5 por ciento.» Aclaremos que gran parte de esos fondos se destinan a pagar intereses de la deuda que arrastra el Estado argentino con el propio FMI.

En la campaña electoral, que lleva a cabo al menos desde 2019, el líder «libertario» propone dolarizar la economía, cerrar el Banco Central y liquidar las empresas e instituciones del Estado, entre ellas el CONICET [Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas], el organismo que se dedica a la promoción de la ciencia y la tecnología.

Es pertinente recordar que esa misma política privatizadora y de desmantelamiento estatal ya fue ejecutada en los años noventa por un gobierno peronista, el de Carlos Saúl Menem, con el apoyo popular durante casi una década, también vale decirlo. Pizza y champán era el eslogan, cuando 1 peso equivalía a 1 dólar. Todos felices en aquellos momentos…

Los ladrillos del muro

Uno de esos ladrillos que invocamos, como ejemplo de los muchos que se acumulan en el muro que separa a la dirigencia política del pueblo, fue por ejemplo el que el PCA (Partido Comunista de la Argentina) aportó con la firma de un acuerdo con la Coalición Cívico-Militar en 1973 encabezada por el Gral. Jorge R. Videla como representante principal de los militares. Al año siguiente, en marzo de 1976 se produjo el golpe de estado que derrocó al tambaleante y nefasto gobierno de Isabel Perón, golpe militar que se ejecutó con el apoyo de gran parte de la población civil. La dictadura militar desplegó una campaña de extermino contra la población civil con claras«raíces ideológicas en el movimiento fascista de cosecha propia argentina», como declararía el propio almirante Emilio Massera «Argentina estaba combatiendo una «Tercera Guerra Mundial» entre el materialismo dialéctico y el humanismo idealista, lo que significaba eliminar la influencia de Marx, así como de Freud y de Albert Einstein» [2. Vincent Bevins. El método Yakarta. Madrid, Capitán Swing, 2021, p. 310-311] [3. Federico Finchelstein. The Ideological Origins of the Dirty War, New York, Oxford University Press, 2014, p. 127]

Previo a esto, en 1973, se creó desde el propio Estado durante un gobierno democrático la Triple AAA, (Alianza Anticomunista Argentina), una organización parapolicial de ultraderecha gestada en el propio gobierno peronista, que como es sabido participó y ejecutó decenas de miles de jóvenes militantes, sindicalistas y civiles incluso sin militancia activa. El terrorismo de estado funciona de ese modo. Mata por las dudas, para crear pánico y sumisión en la población. [4. Atilio Borón. Bitácora de un navegante. Teoría política y dialéctica de la historia latinoamericana, Buenos Aires, CLACSO, 2020, p. 72. Enlace abierto: https://www.clacso.org/wp-content/uploads/2020/10/Atilio-Boron-Antologia-esencial.pdf].

Otra década infame

Hago un paréntesis levemente autorreferencial, por ende narcisista, para evocar momentos de mi intensa y añorada juventud…

Nací en Buenos Aires, en el barrio de Villa Real y me crié en el sur de Buenos Aires, en el Barrio San José de la localidad de Temperley. En la zona fuimos testigos cercanos junto a mis padres de hechos trágicos, entre ellos la llamada «Masacre de Pasco». [5. «Los acribillaron y volaron los cuerpos con granadas: la Masacre de Pasco, el asesinato en masa más sangriento de la Triple A». Infobae, en línea: https://www.infobae.com/sociedad/2021/03/20/los-acribillaron-y-volaron-los-cuerpos-con-granadas-la-masacre-de-pasco-el-asesinato-en-masa-mas-sangriento-de-la-triple-a/].

La década infame de los años ´70 y principio de los ´80 me acercó a militar en las juventudes comunistas y luego, en función de mi sector de trabajo, en el movimiento sindical, primero en la UOCRA (Unión Obrera de la Construcción de la República Argentina) y luego en la UOM (Unión Obrera Metalúrgica), ambas organizaciones pertenecientes al movimiento sindical peronista, en ambos casos en listas internas opositoras a la burocracia sindical que controlaba dichas organizaciones obreras, una especie de barras bravas, que manejaban las cuotas que pagaban los afiliados, entre otras cosas…

En la universidad mi militancia fue escasa, aunque participé por ejemplo en la manifestación del 30 de marzo de 1982, [6. «La masiva marcha que lideró Saúl Ubaldini y fue el primer desafío al poder de la dictadura militar». Infobae, en línea: https://www.infobae.com/sociedad/2022/03/30/paz-pan-y-trabajo-a-40-anos-de-la-movilizacion-que-marco-el-principio-del-fin-de-la-dictadura/] tres días antes del desembarco de los militares argentinos en las Isla Malvinas, guerra de la que me libré por muy poco y en la que murieron dos muchachos cercanos, de mi barrio uno, del trabajo el otro.

Mi padre, que era albañil y delegado sindical no liberado de la UOCRA falleció ese año; estaba sin trabajo, excluido del propio gremio por no ser partícipe de contubernios ni cómplice de prebendas que otros impunemente aceptaban. Luego de estar detenido por su militancia sindical, preso en dos ocasiones, fue liberado unos meses antes de su muerte. Tenía 49 años.

En los noventa aterricé en España. Dicho esto, continúo.


Apilando ladrillos en el muro

Durante esas décadas los ladrillos siguieron agregándose al muro. Los partidos autodenominados de «izquierda», incluida la izquierda peronista, cada vez más aferrados a un discurso más inaccesible para la clase obrera. Sus dirigentes demostraron no haber aprendido nada del «Che» al que tanto invocaban llevando su imagen a cada acto, piquete o manifestación.

Mientras el movimiento sindical argentino —un fenómeno probablemente único en el mundo, ya que el porcentaje de afiliados es de los más altos de occidente— manejan y controlan los servicios sociales y sanitarios de los trabajadores, lo cual en su momento fue un logro y una conquista obrera indiscutible. Otra cosa es lo que ha sucedido con muchos de estos gremios y la gestión de los recursos, con dignas y meritorias excepciones.

El gobierno actual, cuya lista que acaba de ser derrotada en estas PASO, mantiene un raro equilibrio entre un discurso social que de repente firma un convenio bilateral con Rusia y luego con China y a la semana siguiente celebra un viaje a Washington y después pide ingresar en el grupo de los BRICS.

Mientras incluso los medios de comunicación afines asisten estupefactos a la firma de un nuevo empréstito con el FMI que permita seguir pagando intereses de una deuda con las corporaciones internacionales capitalistas que nunca se acaba, por el contrario no termina de incrementarse.

Estimo que si fueran invitados Milei, Macri o su candidata Patricia Bullrich, acudirían encantados a la firma de estos nuevos empréstitos y pasar un fin de semana en Central Park unos y retratarse en el Planet Hollywood de Manhattan otros.

Los argentinos y la relación erótica con el dólar

El genial humorista argentino Tato Bores en un monólogo vigente a día de hoy, hacía un juego en su programa sobre la cotización del dólar frente al peso y la relación de los argentinos con la verde divisa… era el año 1962!!!!!

Y otro programa de los años 80:

¿A qué se debe esta fascinación argentina por la moneda de los EE.UU. desde hace tantas décadas? Fascinación que por cierto también se observa en la mayor de las Antillas…

Seguiremos pensando en torno a este enigma en siguientes páginas…

Mientras nos quedamos con esta reflexión de Wilhelm Reich sobre la falta de relación entre las condiciones sociales y la conciencia de clase:

«Ya hemos visto que las situaciones económica e ideológica de las masas no tienen por qué coincidir y que incluso puede haber entre ellas una divergencia notable. La situación económica no se traslada inmediata y directamente a la conciencia política; si ello fuera así, la revolución social se habría realizado hace tiempo» [7. Wilhelm Reich. Psicología de masas del fascismo. Traducción de Roberto Bein; Introducción e edición Carlos Ledesma Lara; Madrid, Enclave de Libros; Fundación Aurora, 2020, p. 90.]


El amargo desencanto de las masas (II)





El amargo desencanto de las masas (II)

Elecciones: cuando se vota en contra del propio interés

Todo acontecimiento tiene una historia. No emerge de la nada. En este año 2023 la inflación en la Argentina supera el 100% anual. Como si la crisis del 2001, el espectro del famoso y trágico corralito retornara o nunca se hubiese ido. Ningún acontecimiento que se produzca en un país puede reducirse a una circunstancia puntual, aunque se repita cíclicamente, como sucede en el «caso argentino». Por ejemplo, si dijéramos que la crisis de 1929 fue «la causa» del ascenso del Partido Nacionalsocialista en Alemania, parafraseando a Pierre Vilar, deberíamos pedir perdón a la memoria histórica por la ligereza. [1. Pierre Vilar. Pensar la historia, México: Instituto Mora, 1992, p. 57.]



Teatro Colón. Gentileza Ente de Turismo de la Ciudad de Buenos Aires: turismo.buenosaires.gob.ar

El subdesarrollo latinoamericano

A la desaforada esperanza, sucedió, como es natural, una depresión excesiva.

La biblioteca de Babel.

J. L. Borges.

Es sabido que no hay relación causal entre la situación económica y social de un pueblo y un resultado electoral que permite la llegada al gobierno de un partido contrario a sus propios intereses. Siempre habrá otros elementos: apoyos económicos, mediáticos, empresariales, injerencias externas… para que un régimen de esa característica llegue al poder, como sucedió con el trágico ejemplo alemán de los años 30, donde la posición del partido socialdemócrata en aquella época, facilitó las cosas para que así sucediera, ya sea por inoperancia, fragilidad política o ineptitud.

«Sólo una historia comparada (y total —economía, sociedades, civilizaciones) es el instrumento adecuado para descubrir los procesos y poner a prueba los modelos, para distinguir en las múltiples combinaciones entre “lo viejo” y “lo nuevo”, lo que es promesa, lo que es amenaza. Entre las ciencias del hombre, las más ilusorias son aquellas que prometen descubrir en el aislamiento, un solo sector de las realidades (“economía” por una parte, “mentalidades” por otra), como si todos los “sectores” no fueran siempre interdependientes[2. Ibídem, p. 52.]

A principio del siglo XIX las oligarquías criollas en Latinoamérica se desgajaron de España (como ocurrió en Cuba en 1898 y en Panamá en 1903, con la diferencia que ambas pasaron a control directo de los EE.UU. sin interluidos, como bien señala Augusto Zamora). Las luchas contra el colonialismo se produjeron en medio del auge del capitalismo, modo de producción emergente en las potencias de occidente. [3. Augusto Zamora R. Malditos libertadores. Historia del subdesarrollo latinoamericano. Madrid: Siglo XXI, 2020, p. 39].

Pero la verdadera independencia política y por tanto económica nunca llegó a materializarse en los países de Latinoamérica. Hay momentos en los que algunos parecen estar más cerca de lograrlo: Brasil, México… pero nunca terminan de desprenderse de los tentáculos financieros externos del Banco Mundial, del FMI, con deudas públicas que no bajan del 85% y 60% del PBI respectivamente. En esa dirección, estos días de agosto se han producido movimientos interesantes por parte de los países que conforman los BRICS, pese a algunas fricciones entre ellos —China y la India— grupo económico con perspectivas de alcance político creado en 2009 por Brasil, la «aislada y sancionada» Rusia, la hasta hace poco suministradora de madera, carbón, petróleo y gas a precios preferentes a la Europa occidental, India, China y Sudáfrica, que apuntan a un mundo multipolar que pueda hacer frente al unilateralismo de EE.UU. y que en la última reunión, que ha tomado gran trascendencia dado el conflicto en varias direcciones pero con un aparente mismo punto de origen (la disputa por la hegemonía económica mundial entre EE.UU.-Unión Europea por un lado y China-Rusia, por el otro) han aceptado nuevos países miembros: la Argentina, Egipto, Etiopía, la también sancionada República Islámica de Irán, Arabia Saudí y los Emiratos Árabes.

Unos apuntes respecto a los BRICS. Recordemos que el acrónimo «BRIC» surge en 2001 por idea de un miembro, en aquel entones, del grupo financiero Goldman Sachs, el economista Jim O’Neill. También sería pertinente tener en cuenta que en principio y por la propia naturaleza de los países que conforman el grupo no parece que las propuestas de los BRICS vengan a subvertir el orden económico actual del sistema capitalista y precapitalista imperante en gran parte del planeta.

El proyecto de los BRICS (que por el momento no tiene una sede física ni sitio WEB) viene con la expresa intención de disputarle a occidente, es decir a EE.UU. y Europa, el lugar que hasta este momento vienen ocupando por imposición mediante su fuerza militar, económica y cultural, lugar en el que se ha asentado aún más desde la caída del bloque soviético.

La iniciativa se viene desplegando dentro de un marco donde el sistema económico basado en la propiedad privada de los medios de producción, en la libre competencia y en el mercado no creo corra peligro alguno. Pese a ello, la esperanza de una especie de capitalismo con «rostro humano» (nunca entendí el significado de la expresión) que atienda un poco más a las necesidades de los pueblos, siempre siempre será bienvenida.

No hay un único «capitalismo», los hay de varias especies

En los años ´90 el francés Michel Albert escribió un ensayo titulado Capitalismo contra Capitalismo [4. Michel Albert. Capitalismo contra capitalismo, Buenos Aires, Ed. Paidós, 2a. reimpresión, 1993.], donde planteaba que en realidad no existía una sola forma de capitalismo, sino en ese momento, al menos dos modelos: el anglosajón y el modelo renano. El primero, que es el que se ha impuesto, es más desregulado, hecho a medida de las necesidades empresariales, sin atender a la protección de los trabajadores y con libertad total de circulación de capitales y fuerza de trabajo. El renano, vigente en algunos países del norte de Europa (llámese «estado de bienestar») es un modelo más regulado, con variable grado de protección social según cada país y con una legislación laboral con mayor protección de los trabajadores.

Hablar en términos de capitalismo, modos de producción, imperialismo… resulta anticuado en la actualidad, por la incomodidad que produce en las nuevas formas de entender las relaciones económicas entre países. Son términos, mejor dichos conceptos y categorías, que en esta época se consideran obsoletos, al punto que ni siquiera las organizaciones sociales, sindicales y políticas de las izquierdas contemporáneas y «progresistas» se atreven a usarlos.

El reparto de África

Pero la realidad es terca. Lo que se reprime, retorna.

¿Con qué términos y en qué modo puede explicarse la situación de por ejemplo de la República de Níger respecto a sus riquezas naturales y el saqueo a la que es sometida por parte del Estado francés que protege con su ejército a las empresas privadas que ejecutan la extracción de uranio, entre otras materias primas?

[Un apunte: siempre que hay un expolio por parte de empresas privadas de occidente en algún país (Siria, Níger, Irak, etc.), dichas empresas siempre están protegidas por el ejército del Estado al que pertenecen (Francia, EEUU. etc…), es decir, dichos Estados garantizan la apropiación de riquezas de otros].

A la revuelta que desembocó en la caída del gobierno nigerino y de las élites prebendarias leales al Estado francés, se la llamó en los medios de occidente «golpe de estado».

Organizaciones pertenecientes a la llamada «comunidad internacional» (la OTAN y la CEDEAO [Comunidad Económica de Estados de África Occidental] principalmente) reaccionaron amenazando con intervenir militarmente para forzar el retorno a la situación anterior, es decir, volver a colocar en el poder a los que participaban del saqueo de los recursos naturales, con el peligro real de que una nueva guerra civil se produzca en el corazón de Africa. Pero esto a la «comunidad internacional» beneficiaria de la extracción de las riquezas africanas, no le importa lo más mínimo. Es lo que han hecho desde siglos, expolio que se formalizó con el pacto firmado en la Conferencia de Berlín de 1885 convocada por Francia y Alemania para delinear el reparto colonial de África, encuentro al que no fue invitado ningún estado africano.

El reparto de África. Conferencia de Berlín. Publicada en Le Journal L´Ilustration, 1885

Las fuerzas imperiales de occidente, siempre en nombre de la libertad, la igualdad y la fraternidad, en el caso del estado francés, de la democracia, en el caso de las fuerzas del imperio anglosajón y norteamericano, reiteramos, amenazan con intervenir en Níger. El embajador francés acaba ser expulsado del país por la nueva junta de gobierno, y mientras ensayamos estas líneas, se acaba de producir una revuelta en otro país donde Francia tiene gran influencia, nos referimos a la República Gabonesa… Veremos que sucede.

Insistimos. Un concepto es considerado obsoleto o superado cuando define y revela con valor histórico una injusticia por parte de quienes imponen el orden neoliberal y neocolonial (otros dos términos «superados» en el marco del pensamiento de yeso seco de occidente) que marcan las pautas económicas y sociales. Conceptos y categorías rechazados que provienen del campo de la sociología, la ciencia de la historia, el materialismo histórico, etc… que tienen igual valor y vigencia que la ley de la gravedad newtoniana, al menos, sobre la superficie de la tierra.

La independencia que nunca llega

Latinoamérica se independizó de España en el momento en que vastas regiones del mundo cayeron bajo el dominio de otras pocas potencias europeas (Francia, Holanda, Belgica…). Cuando Latinoamérica parecía librarse de esas dos lacras, del colonialismo y del imperialismo, esa independencia nunca ha llegado a materializarse. Los países latinoamericanos (fundados mucho antes que la gran mayoría de países europeos…) salieron de la órbita ibérica y entraron al mismo tiempo en la anglosajona.

Durante el largo y vertiginoso siglo pasado y el presente ha fluido más dinero desde Latinoamérica a los EE.UU. que en la dirección opuesta, pese a la infinidad de préstamos que se firman con el objeto de mantener la dependencia económica e incrementar exponencialmente la deuda. Esto lo resume el documento publicado de Paul Rosenstein-Rodan publicado en 1961 por el MIT. [5. Paul Rosenstein-Rodan (1961). International Aid for Underdeveloped Countries. The Review of Economics and Statistics, 43(2), 107–138. https://doi.org/10.2307/1928662 ; en línea: https://pdfs.semanticscholar.org/895f/2bcb2b9bd4f567e6b31a3d6335b81fe0ac47.pdf.] Este proceso de crecimiento en desequilibrio [6. Paul Rosenstein-Rodan.«Natura Facit Saltum: Analysis of the Disequilibrium Growth Process» (Análisis de «El proceso de crecimiento en desequilibrio»); en línea: https://www.rrojasdatabank.info/pioneers8a.pdf] comercial sólo perpetúa la descapitalización de los países latinoamericanos con el objeto de consolidar la dependencia de éstos: «los empréstitos privados y públicos los integran países deudores, y como las ganancias provenientes de las inversiones privadas se repatrían, hay una transferencia neta de riqueza del país en desarrollo al país desarrollado». [7. Karl Deutsch. «Social Mobilization and political Development», The American Political Science Review, vol. 55, núm. 3, septiembre de 1961, Yale University Press, New Haven, Connecticut, pp. 493-514, disponible en: https://www.jstor.org/stable/1952679]. [8. Augusto Zamora R. Ibídem, p. 40]. La independencia, necesaria, imprescindible, de los reinos de España y de Portugal, solo significó cambiar de tipo de dominación y de amo.

Las oligarquías criollas

Latinoamérica pasó sin transición alguna del decadente y grisáceo imperialismo ibérico, como hemos apuntado, a otro más taimado, cruel y rapaz, al británico primero y al estadounidense hasta nuestros días, ambos más incisivos e implacables. [9. Ibídem, p. 44].

En su libro «La acumulación del capital», en el capítulo dedicado a los créditos internacionales, Rosa Luxemburgo afirmó que los préstamos«son indispensables para la emancipación de los estados que aspiran a ser capitalistas y son, al mismo tiempo, el medio más seguro para que los estados capitalistas antiguos ejerzan su tutela sobre los modernos, controlen su Hacienda y hagan presión sobre su política exterior y sobre su política aduanera y comercial.»[10. Rosa Luxemburgo. «Los empréstitos internacionales», en La acumulación del capital. Disponible en: https://www.marxists.org/espanol/luxem/1913/1913-lal-acumulacion-del-capital.pdf].

Este certero análisis de Rosa Luxemburgo sigue vigente hoy día, donde muchos países no pretenden salir del sistema capitalista dominante, sino por el contrario procuran y ruegan entrar en él, dado que sus economías y relaciones de producción en gran parte de ellos (África, Latinoamérica), son precapitalistas. La mayoría de partidos progresistas y fuerzas políticas de nuevo cuño apuntan en esa dirección. El objetivo que manifiestan esas organizaciones políticas autóctonas, es que los países y pueblos que dicen representar sean capitalistas de pleno derecho. Y ese un error elemental si lo que se pretende con ello es el bienestar y autonomía de esos países. Los países que ocupan el centro de poder no lo permitirán, ya que por estructura necesitan de regiones precapitalistas para sostenerse, mediante la llamada «acumulación originaria» permanente, como se observa en los países africanos que suministran las materias primas a precios irrisorios y prebendas mediante, que Europa necesita, puesto que sin ese trasvase de riquezas el «aglomerado» europeo se desmoronaría.

Los grupos dominantes de las oligarquías regionales (oligarquía es otro término que se considera caduco, pese a la vigencia por la necesidad de su uso para nombrar una realidad histórica) de cada uno de los países latinoamericanos librados del dominio ibérico estuvieron siempre más pendientes de satisfacer el poder de Londres primero, y el de Washington después que de crear Estados libres fuertes, industrializados y pueblos educados. Así hasta nuestros días.

Las oligarquías criollas «(…) favorecieron el neocolonialismo y siguen siendo abanderadas de sistemas económicos y sociales que mantienen a los países anclados en el siglo XVIII.» [11. Augusto Zamora, R. Ibídem, p 143-144.] Mientras gobiernos «progresistas» regionales siguen recurriendo a quienes armaron el entramado neocolonial para meter a Latinoamérica en este laberinto (FMI, Banco Mundial, etc..) para que la saquen de él. Es ingenuo creer que el que creó la trampa financiera para su propio beneficio renuncie a ella sin más y acuda al rescate.

Cerramos esta parte resumiendo que en las oligarquías latinoamericanas encontramos una de las claves principales de la situación actual de la región. Aunque el término «oligarquías» esté anticuado y devaluado por su intencionado desuso, los pueblos latinoamericanos y africanos nunca han podido librarse de ellas.

En el caso argentino es más que evidente.


SIGUIENTE:

El amargo desencanto de las masas (III)





El amargo desencanto de las masas (III)

«No hay más tonto que un obrero que vota a la derecha»

Se lee habitualmente en las mal llamadas redes sociales frases del estilo: «no hay más tonto que obrero que vota a la derecha», y afirmaciones semejantes. Ser de «derecha» para el ser humano es inercial, casi «instintivo»… No serlo implica un trabajo ético y moral de reflexión.



Es admirable la fascinación que tienen los candidatos políticos por los cascos obreros cuando se aproximan las elecciones…

Volver con la «izquierda marchita»…

No cabe duda alguna que occidente viene desplazándose hacia la derecha desde hace décadas, algo de lo que los «eurocomunistas» han sido expertos en el derrape, del cual más de uno se pasó de carril.

Ser de «derecha» para el ser humano es inercial, casi «instintivo»… No serlo implica un trabajo ético y moral de reflexión.

Así, con indescifrable intención, nos lo presenta Stanley Kubrick en la primera secuencia de la película «2001. Una odisea del espacio». En ella se ve a un grupo de «monos-hombre» apropiándose de una charca. Agrediendo y golpeando al resto de habitantes del lugar para que no se acerquen a ella. Estos deben responder y luchar para poder hacerlo si no quieren perecer de sed, pero terminan rindiéndose…

Parece habitar algo «instintivo» en la especie humana que empuja a sus miembros a la posesión de cosas —en aquellas prehistóricas épocas, alimentos; hoy mercancías— más allá de la necesidad. Lo hemos observado en la reciente pandemia cuando algunas personas adquirían —ante el pánico inducido por los medios de una inminente escasez de productos básicos— en las tiendas y acumulaban en sus casas artículos tales como papel higiénico, aceite, leche, etc. en cantidad exageradas.

La frase respecto al obrero tonto que vota a la derecha, me recuerda, por el inexistente análisis previo del que la pronuncia, una anécdota —no puedo evitar decir que me dedico a estudiar psicoanálisis—.

Un paciente en una sesión de análisis, ante la demanda de divorcio que le presentó «su» esposa, me dijo:

— «Yo… a ella no la entiendo. Yo que le di todo, y ahora va y me deja por que me huele el aliento» (las negritas obviamente son mías).

¿Qué quiso decir este hombre con «le di todo»? ¿Qué entendió al menos en ese momento por «todo»? ¿Qué significó para su psiquismo activo en la pereza de reflexionar cuando escucha la frase que le dejan «porque le huele el aliento»?

Halitosis y Límites

Un apunte. Como bien saben los físicos e ingenieros el «momento flector» señala el límite donde una viga sostenida en dos puntos de apoyo sometida a presión vertical puede ceder. Es decir, si dicho límite de fuerza es superado la viga termina partiéndose. Aquí el esquema extraído de un libro de resistencia de materiales:

Momento flector de una viga con dos apoyos.

Insultar a un obrero por que no vota lo que se espera que vote, es creer en el determinismo causal, es decir, que por el solo hecho de que un trabajador sea explotado dentro de un régimen laboral su conciencia de clase surgirá como las flores en un campo de orégano.

Siguiendo con la sesión con el paciente:

— «No estimado paciente. Su mujer le dejó por qué Ud. no hizo nada para que el aliento no le huela. Su esposa se aleja por la dejadez en la que Ud. mismo se instaló. Olvidó, y quizá nunca supo, que el cariño y el amor es un trabajo cotidiano. Ante el amor no se puede descansar. Y «su mujer» que parece ser alguien que piensa, puedo suponer que labora día tras día para que su deseo, el de ella, no se le marchite junto al suyo, ni se le pudra como su aliento. No estimado paciente!!, su esposa, que nunca ha sido suya, no le deja, sino que se aleja para resguardar su deseo y sus intereses. Ud. se pasó del límite. Superó el «momento flector» de su esposa.»

Recuerdo perfectamente que no le dije semejante parrafada al unidimensional hombre. Pero ganas no me faltaron. (En ocasiones tengo que hacer un ejercicio deontológico para no olvidar que mi consulta no es la barra de un bar y recordar que aún en la calle me debo al oficio que elegí, aunque no siempre puedo lograrlo… La formación continua es imperativo.

Soy un aprendiz… por siempre.

Continuamos las sesiones semanales o quincenales, ya que el im-paciente solía cambiar la hora de los encuentros habitualmente (si no era por causa justificada, la sesión me la tenía que abonar, eso ponía límite a su dejadez y a mi «momento flector» laboral), durante un mediano tiempo.

Luego de aquello, un día me lo encontré por la calle. Me saludó, se paró frente a mí, lo reconocí al instante y con un gesto claro de querer conversar amistosamente conmigo me dijo:

—«Se acuerda de mí?».

Asentí con la cabeza.

—«Sabe Doctor, que me encontré hace poco a mi mujer escribiendo en facebook y en ese momento, cuando lei lo que ella escribió, me di cuenta de que nunca la entendí. Es que somos tan distintos…!!! »

El hombre me habló como si su halitosis, su mujer y su divorcio fueran para mi tema diario de reflexión.

— «Nunca la entendí», insistió.

—«Tampoco lo intentó», pensé en ese momento.

Obviamente, como aquella vez en la lejana pero muy presente sesión, la última de aquel día para mí, algo cansado pero con un mínimo de prudencia clínica [phronēsis, le llamaba Aristóteles] nota [1. Aristóteles. Ética Nicomáquea. Madrid, Editorial Gredos, 1985, p. 275-276], no se lo dije.

Algunos políticos «abandonados» por sus electores funcionan como este im-paciente…

La tarde del reencuentro al despedirnos, después de tan sincera confesión, el hombre me dio la mano con afecto peatonal pero sincero. Respondí amablemente a su mirada, con un extraño alivio y seguimos cada cual nuestros respectivos senderos. Me alejé mirando cautamente a ambos lados, para no caer atropellado por un patinete, o bajo la bicicleta de un repartidor de una empresa de pizzas a domicilio… no se por qué me apresuré a cambiar de acera para continuar mi camino.

Mientras, deambulando entre la inflacionaria Argentina y la vieja y gris Europa[península de Eurasia y cuchara de EE.UU. ya que ni corta ni pincha [2. Augusto Zamora R. Réquien polifónico por occidente. Madrid, Akal-Foca, 2018, p. 8], sólo obedece a Washington]parafraseando el tango de Carlos Gardel, seguimos con la «izquierda marchita»…


El amargo desencanto de las masas (I)





Dimensión política y social de las prácticas «psi»

 

Trabajar en el campo de «salud mental» implica pensar la experiencia clínica como un acompañar dando acogida a un dolor que habla y requiere ser escuchado a través de una espera que nada espera, sin adherir a un saber revelado en una tabla taxonómica o en un manual psiquiátrico. El trabajo clínico requiere hacer amistad con la inminencia[1], con lo que no está, con lo que está por venir o quizá no vendrá, contrario al ideal de las instituciones psiquiátricas, donde se espera que no pase nada y donde todo esté bajo control.



Las reformas psiquiátricas se han planteado y se implementan pensando en los psiquiatras y en los trabajadores de los hospitales, de tal modo que lo que se pretende instaurar en los centros de «encierro» es la disciplina y la obediencia. Recordemos lo que Deleuze señaló al respecto:

Así, por ejemplo en la crisis del hospital como medio de encierro, es posible que la sectorialización, los hospitales de día o la asistencia domiciliaria hayan supuesto en un principio nuevas libertades; ello no obstante, participan igualmente de mecanismos de control que no tienen nada que envidiar a los más terribles encierros. No hay lugar para el temor ni para la esperanza, sólo cabe buscar nuevas armas [2].

El profesional «psi» que se limita a realizar prácticas de evaluación y sujeción de los pacientes, se comporta como un «auxiliar técnico» de una «maquinaria de ingeniería social», que conoce funciones protocolarias estipuladas y prescribe un tratamiento estandarizado farmacológico, pero no ejerce de este modo como profesional clínico. El recurso al fármaco en ocasiones, como por ejemplo una depresión profunda o en un episodio psicótico agudo, puede resultar inevitable, pero no como un tratamiento en sí, sino para movilizar y tranquilizar de algún modo al sujeto, para que éste pueda balbucear algo sobre su malestar, implementando junto al fármaco un dispositivo clínico que dé contención y salida del nudo depresivo o del episodio agudo.

Pero reducir un estado depresivo a una simple relación entre «soma» y «mente» es caer en postulados reduccionistas y equívocos. ¿El supuesto déficit de monoaminas es causa de la depresión o es la tristeza en la que esté sumergido un sujeto la que altera su metabolismo? El cuerpo está afectado por el deseo, por el Otro, por el lenguaje, pero el cuerpo del psiquismo no es el cuerpo de la medicina, por tanto tal vez un tratado de Spinoza o de Nietzsche tenga hoy valor mayor para analizar los oscuros senderos del psiquismo humano que cualquier volumen de clasificación psiquiátrico:

El hombre es afectado por la imagen de una cosa pretérita o futura con el mismo afecto de alegría o tristeza que por la imagen de una cosa presente [3].

Cuando se «sujeta» mecánicamente a un paciente se produce un violento acto de dominación ignorando que toda tarea clínica tiene necesariamente una dimensión política, donde lo histórico, lo cultural, lo social y lo económico se articulan en procesos de subjetividad que afecta a todo ser humano, elementos constitutivos de nuestra sociedad que no pueden ni deben ocultarse. Los dispositivos institucionales se muestran como dispositivos de captura y control, máquinas reproductoras de autoritarismo similar a los dispositivos que operan del mismo modo en la educación, la cultura, el trabajo, la política…

El contexto autoritario de la «fábrica de cura mental» induce a colaborar y obedecer, a digerir las normas y reglas institucionales. La universidad —que ofrece titulación en psicología y psicoterapia incluso a distancia!!!!: ignoro quién puede tener la capacidad de transmitir saber clínico de esa manera; es indudable que quienes avalan ese forma mercantil de «enseñanza» no disponen de saber alguno, si del lucrativo, ya que los estudiantes tienen luego que pasar por caja para obtener un «máster», etc… que los avale oficialmente para ejercer un oficio sin las herramientas mínimas, ningún oficio, y menos aún este, puede enseñarse a distancia—y el hospital fabrican esos profesionales «unidimensionales marcusianos» convirtiéndolos en burócratas institucionales, así el orden social contemporáneo —y el psiquiátrico— manifiesta su dictadura y resistencia a ser abolido, por el momento, con evidente éxito.


[1] Marcelo Percia, Deliberar las psicosis, Lugar Editorial, Buenos Aires, 2004.

[2] Gilles Deleuze, Conversaciones, Pre-Textos, Madrid, 1999, p. 279.

[3] Baruch Spinoza, Ética demostrada según el orden geométrico, Alianza, Madrid, 1989, p. 214.




Psicoanálisis: una ciencia conjetural

El psicoanálisis es una disciplina, una ciencia conjetural, que nació en el corazón de la vieja Europa, entre bombardeos y campos de concentración, y que fue llevada a América por hombres y mujeres, muchos de ellos españoles, que huyendo de esas condiciones reinantes en Europa se instalaron en aquellas tierras, donde las posibilidades de trabajo e investigación, tanto sociales y culturales como económicas eran, con mucho, superiores a las que se daban aquí. Un caso aparte fue Freud, que resistió valiente o temerariamente en la ciudad de Viena hasta un año antes de su muerte: sólo en 1939, después de que fusilaran a sus hermanas y hermanos, y quemaran sus libros en la puerta de su casa, no tuvo más remedio que exiliarse en Londres, ya que su vida corría peligro y su trabajo se veía fuertemente perjudicado.

Psicoanálisis en España

Por lo que respecta a la difusión en España de la teoría freudiana, es necesario mencionar un detalle no trivial: fue Ortega y Gasset quien encargó en 1920 al español Luis López-Ballesteros y de Torres (1896-1938) la traducción de las obras completas de Freud, que comenzaron a publicarse en Madrid, en la editorial Biblioteca Nueva, a partir de 1922. Recordemos la carta que el propio Freud envía a su traductor castellano el 7 de mayo de 1923:

Siendo yo un joven estudiante, el deseo de leer el inmortal «Don Quijote» en el original cervantino me llevó a aprender, sin maestros, la bella lengua castellana. Gracias a esta afición juvenil puedo ahora —ya en edad avanzada— comprobar el acierto de su versión española de mis obras, cuya lectura me produce siempre un vivo agrado por la correctísima interpretación de mi pensamiento y la elegancia del estilo. Me admira, sobre todo, cómo no siendo usted médico ni psiquiatra de profesión ha podido alcanzar tan absoluto y preciso dominio de una materia harto intrincada y a veces oscura. nota [1. Sigmund Freud, «Unas palabras del profesor Freud sobre la versión castellana de sus obras completas», O.C., p. XLV.]

Los motivos por los cuales el psicoanálisis, en el caso particular de España, encontrara y siga encontrando tantas resistencias, es un tema para un debate o discusión que requeriría de otro espacio de trabajo. Lo que nos parece importante destacar, sin embargo, es que su difusión encontró resistencias tanto en el ámbito académico como en la práctica clínica, privada y pública. Esto resulta tanto más sorprendente si consideramos que la teoría psicoanalítica cumple con la consigna de los clásicos griegos —Hipócrates y Asclepio fundamentalmente—, que consiste en tratar los malestares de los hombres y mujeres a través de la palabra, y aún más si pensamos que es del psicoanálisis de donde fueron surgiendo la infinidad de psicoterapias y psedo-terapias actuales.

Clínica de la escucha

Por lo que concierne a Freud, que podemos considerar el fundador de una clínica de la escucha, algunas de sus tesis y afirmaciones pusieron al psicoanálisis en una situación de sospecha y rechazo. Entre ellas podemos citar:

■■ El descubrimiento de que en la vida infantil, desde el nacimiento, ya hay sexualidad, a diferencia de lo que se pensaba en la época de esta afirmación, esto es, que la sexualidad emergería en las puertas de la vida adulta. Esto que rudimentaria y vulgarmente se acepta hoy —se habla de traumas infantiles, de las consecuencias de un abuso sexual para la vida del niño—, en ese momento fue considerado como una herejía.

■■ La tesis según la cual la sexualidad no se reduciría a la genitalidad, como aún hoy creen los médicos positivistas, psiquiatras, psicólogos y sexólogos.

■■ El descubrimiento, que llevó a Freud a apartarse de la Sociedad Médica de Viena, de que la histeria no es una problemática psíquica exclusiva de la mujer, sino que también el hombre puede galopar a lomo de la histeria, descubrimiento que en la mencionada conservadora sociedad médica europea resultó intolerable.

La tesis según la cual la pulsión no tiene un objeto definido que la satisfaga —no hay un objeto para cada necesidad—, esto es, que la pulsión, a diferencia del instinto, no está determinada biológicamente, como puede observarse en el fetichismo, donde alguien puede «gozar» con una prenda de vestir, un zapato, una jeringuilla, etc.

Pese a estas resistencias al psicoanálisis, nuestro lenguaje cotidiano está habitado por términos que esta disciplina produjo como conceptos teóricos —resistencia, represión, deseo inconsciente, complejo, acto fallido, lapsus, identificación, libido, pulsión, narcisismo, sublimación, inconsciente…—, pero cuyo uso rutinario se ha apartado del valor epistemológico original, con la consecuencia de que dichos conceptos han sido devaluados en el habla común, incluso por obra de algunas corrientes desviadas dentro del propio movimiento psicoanalítico.

Sigmund Freud definió el psicoanálisis como:

■■ un método para la investigación de procesos anímicos inaccesibles de otro modo;

■■ un método terapéutico de perturbaciones neuróticas basado en tal investigación;

■■ una serie de conocimientos psicológicos así adquiridos, que van constituyendo paulatinamente una nueva disciplina científica.

El sujeto, viene a decirnos el psicoanálisis, se produce en la palabra, más allá del determinismo cientificista que busca en los genes la causa de los malestares psíquicos. Se han cumplido más de cien años desde la publicación de la Interpretación de los sueños; en las últimas décadas, con los «avances» de las llamadas neurociencias, el psicoanálisis parece relegado a un segundo plano, cuando del entendimiento del sufrimiento psíquico se trata.

El hombre sufrió a lo largo de su historia tres grandes «humillaciones» o, en palabras de Freud, tres «heridas narcisistas»:

■■ la primera proviene de Copérnico, quien demostró que la tierra gira alrededor del sol, privando de esta manera al hombre del lugar central que creía ocupar en el universo;

■■ luego Darwin, al demostrar que venimos de un proceso de selección ciego, nos destronó de nuestro lugar de honor entre los seres vivos;

■■ y por último el propio Freud, al develar el rol predominante del inconsciente en los procesos psíquicos, demostró que el yo no gobierna en su propia casa, como se creía hasta ese momento, sino que está sometido a sobredeterminaciones que desconoce.





índice de artículos:

Psicoanálisis

Salud Mental

Adicciones

Toxicomanías: «recaída» y «sobredosis»

Toxicomanías: ¿estructura, síntoma, síndrome o enfermedad

Toxicomanías: el malestar en la adicción

Acompañamiento Terapéutico

Acompañamiento Terapéutico: una descripción del dispositivo

Lugar posible del Acompañamiento Terapéutico

El trabajador de la «salud mental», su deseo y angustia

«Encuadre» del Acompañamiento Terapéutico

Senderos Clínicos del Acompañamiento Terapéutico

Psicología de las masas del fascismo: Wilhelm Reich

Breve biografía de Wilhelm Reich

Sexualidad y Política: La «SexPol»

Nueva edición del libro: «Psicología de masas del fascismo»

(I) La «gran depresión» capitalista de los años 30: El ascenso del fascismo en Europa

(II) Fundación de la «Sexpol»: políticas sexuales proletarias

(III) La contradicción de las masas

(IV) La «conciencia de clase» que nunca llega…

(V) Del «marxismo vulgar» al «psicoanálisis diluido»

(VI) Wilhelm Reich: condena, prisión y muerte

Pensamiento Contemporáneo

Psicoanálisis y Marxismo

«Freudomarxismo»: ¿un proyecto epistemológico imposible?

Aburrimiento contemporáneo y evasión

Problemáticas del poder

Apuntes sobre legislación en «disforia de género»

Geopolítica

Efectos del «bloqueo» en el sistema sanitario de Cuba (I)

La perversión de la mal llamada «comunidad internacional» (II)

El amargo desencanto de las masas (I)

El amargo desencanto de las masas (II)

El amargo desencanto de las masas (III)

«Rusofobia» y después…





«Rusofobia» y después…

Un «pre-juicio» no se fabrica ni tampoco se inocula en la población en un instante. Quien pretenda lograr tal tarea necesitará tiempo y sobre todo poder (tanto real como atribuido). Gran parte del «pensamiento occidental» se ha dedicado a construir a lo largo de muchas décadas una serie de prejuicios, en el caso que nos compete aquí, sobre el pueblo y la cultura rusa. Se ha falsificado y borrado parte sustancial de la historia reciente. Gobiernos y grupos de poder han falsificado y ocultado hechos y acontecimientos históricos según sus necesidades políticas y sobre todo económicas en cada momento. Para ello los correspondientes estados y sus organizaciones (miembros de la pretensiosamente autodenominada «comunidad internacional») disponen de la maquinaria publicitaria necesaria para difundir las consignas adecuadas moldeando el mundo según sus intereses.



En el primer párrafo de la «Investigación sobre los principios de la moral» David Hume nos advierte que:

«Las disputas con hombres que se obstinan en mantener sus principios a toda costa son las más molestas de todas, quizá con la excepción de aquellas que se tienen con individuos enteramente insinceros que en realidad no creen en las opiniones que están defendiendo, y que se enzarzan en la controversia por afectación, por espíritu de contradicción y por el deseo de dar muestras de poseer una agudeza y un ingenio superiores a los del resto de la humanidad»[1. Hume, David. Investigaciones sobre los principios de la moral. Prólogo y traducción de Carlos Mellizo. Madrid: Alianza Editorial, 2006.].

Y continúa el filósofo escocés:

»De ambos tipos de personas debe esperarse la misma adherencia a sus argumentos, el mismo desprecio por sus antagonistas y la misma apasionada vehemencia en su empeño por hacer que imperen la sofistería y la falsedad. Y como el razonamiento no es la fuente de donde ninguno de estos dos tipos de disputantes saca sus argumentos, es inútil esperar que alguna vez lleguen a adoptar principios más sólidos guiándose por una lógica que no hable a sus afectos».

La «noticia» es anterior al suceso

Si consideramos los acontecimientos de estos tres últimos años, no debería dejarnos de sorprender la cantidad de conocimientos que atesoran y transmiten con vehemencia los «divulgadores de noticias», «tertulianos»… (unos pertenecientes a los medios de comunicación dominantes, otros aspirantes a incorporarse a ellos).

Estos comunicadores pueden pasar con soltura de temas de «actualidad» tales como el SARS-CoV-2 a la cuenca del río Donetsk, describiendo y explicando ambos fenómenos: uno epidemiológico y sanitario, el otro geográfico, político e histórico. Es admirable la «capacidad» que manifiestan, sabiendo de las dificultades académicas que presenta adquirir conocimientos sobre ambos temas. Conocimientos que los comunicadores exponen de forma generosa, altruista ya sea en prensa escrita, en radio y televisión a sus semejantes que conforman masas ocupadas en menesteres pedestres, «conocimientos» e «información» que de otro modo no podrían tener a su alcance.

Masas que —ateniéndonos a la dedicación misionera de los informadores— parecen tan solo disponer a nivel sanitario de unos rudimentarios conocimientos sobre los beneficios de los protectores solares y en el orden geográfico tan sólo pueden manejar con soltura los caminos que por carretera, tren, metro o autobús la conducen a sus puestos de trabajo, de ocio, a lugar de asistencia social, sanitaria, etc…

La fabricación de la «información»

En 1999 se publicó en París un breve ensayo prologado por el sociólogo Horacio González titulado «La fabricación de la información» [2. Aubenas, Florence. Benasayag, Miguel. La fabricación de la información. Prólogo de Horacio González. Buenos Aires: Ediciones Colihue, 2005.]. En él sus autores señalan que el trabajo del periodista ya no consiste en rendir cuenta de la realidad, sino en hacer entrar a esta en el «mundo de la representación» (comillas mías), «representación» que construyen los propietarios de los medios que circunstancial y precariamente —la mayoría de las veces— los contraten.

Una representación puede ser producto de, por ejemplo, la ilusión del amante que construye el rostro prefecto de su amado, representación inconsciente y en consecuencia subjetiva alimentada por el fuego del deseo o de la elección (cuesta aceptar que una elección pudo no ser la adecuada).

Tenemos también la representación que construye el dramaturgo con la complicidad de sus lectores, actores y espectadores necesariamente cómplices. El arte sin al menos un cómplice es imposible.

Otro tipo de representación es aquella que es producto de un «plan perverso de manipulación» que poco tiene que ver con el amor o con el arte, pero que también requiere complicidades. Son mayoritariamente conscientes quienes la construyen, siendo inconscientes por lo general aquellos a quienes va dirigida, sus receptores. En el salvaje campo de la industria de la información encontramos directores de periódicos, programas de radio y televisión que por necesidad o convicción obedecen y cumplen con el mencionado «plan».

Cada período histórico (períodos cada vez más cortos, ya que constantemente cambia el foco de «la noticia») tiene un tema central.

Por ejemplo: cada cuatro años las elecciones presidenciales en EE.UU. En 2008 los medios «progresistas de occidente» se decantaban efusivamente por el candidato demócrata frente al candidato republicano. Esos medios progresistas occidentales presentaron al candidato del partido demócrata como el más adecuado para los intereses de los pueblos del mundo. Resultó que el ganador de las elecciones, nominado a premio nobel de la paz casi antes de ser presidente —premio que luego le concederían— ordenó bombardear al menos ocho países durante su gobierno.

Periodismo domiciliario: los «youtuber»

Al mercado de los medios tradicionales en esta última década, y sobre todo estos dos años de «confinamiento», se han reproducido los «youtuber», una especie de periodistas domiciliarios. Pretenciosos expertos en casi todo, que desde la pantalla de una computadora y con pocos medios, tal que pastores evangelistas, fabrican opinión o reproducen la oficial.

Los «opinadores» se muestran sólidos, sin fisuras, omniscientes. Apabullan a sus seguidores, a quienes hacen partícipes de sus programas (canal) al pedirles directamente que contribuyan —¿instinto gregario revival?— y sean parte del proyecto ¡aportando dinero!

[Entre toda la inabarcable oferta he llegado al encuentro de algunas excepciones de comunicadores, profesionales o incluso aficionados que construyen programas de cierta calidad y honestidad, sujetos que estudian, investigan y se avalan a sí mismos merced a los contenidos trabajados que transmiten, alguno de los cuales escucho].

Volviendo al tema central, sabemos que las agencias de noticias que controlan la mayoría de la información que los medios compran y distribuyen en sus periódicos pertenecen a tres grandes empresas:

■■ Thomson Reuters (Agencia canadiense que absorbió a la británica Reuter en 2008);

■■ Associated Press (AP: EE.UU.);

■■ Agence France-Presse (AFP: Francia).

Manipulación y propaganda

El que fuera un pionero de la teoría y práctica de la manipulación de las masas a través del manejo de la información, Edward Bernays, sobrino de Sigmund Freud, señaló en un libro ya clásico sobre el tema:

«La manipulación consciente e inteligente de los hábitos y opiniones organizados de las masas es un elemento de importancia en la sociedad democrática. Quienes manipulan este mecanismo oculto de la sociedad constituyen el gobierno invisible que detenta el verdadero poder que rige el destino de nuestro país. Quienes nos gobiernan, moldean nuestras mentes, definen nuestros gustos o nos sugieren nuestras ideas son en gran medida personas de las que nunca hemos oído hablar. Ello es el resultado lógico de cómo se organiza nuestra sociedad democrática» [3. Bernays, Edward. Propaganda. Editorial Melusina, 2008.].

No hay duda de que la manipulación y la falsificación no son propiedad exclusiva de los medios de comunicación, herramienta imprescindible del sistema. Desde la academia también llegan falsas filosofías, falsas medicinas, psicologías, pedagogías, etc.

Pero eso sí, no podrá engañarnos jamás un albañil o un panadero. Podremos descubrirlos en la impostura o en la estafa: el objeto [la mercancía] que cada uno de ellos nos pueda vender, ya sea al terminar una  obra doméstica o al llegar a casa y sacar el pan de la bolsa, el engaño, de producirse, será «real», «material»: el pan estará duro como un ladrillo o la pared se derrumbará como una tarta. Pero la noticia que nos vende un periódico o un político es más difícil que podamos comprobar su veracidad, puesto que requerirá sentido crítico, análisis e investigación para contrastarla y que por limitación de tiempo o capacidad material, interés propio o ideología no dispondremos y por tanto nos limitaremos a aceptar como válida incluso por pereza o por cansancio, sometidos como estamos al «reino de la necesidad» cotidiana, la subsistencia.

En los medios y cadenas de transmisión las noticias falsas o sesgadas son las que más repiten machaconamente los profetas del engaño, como las ya tristemente famosas «armas de destrucción masiva» iraquíes, falsa noticia con la se pretendió justificar la destrucción y saqueo de un país milenario para imponerle la «democracia occidental».

También es habitual que las masas acepten lo que la mayoría, sea por identificación «gregaria» o sea por temor a quedar fuera del grupo de im-pertenencia: la familia, la oficina, la fábrica, el sindicato, la barra de amigos del bar o la «red social» a la que se esté suscrito.

La condena desde los medios «occidentales» a la cultura rusa en todas sus manifestaciones nos recuerda a la propaganda antisemita del siglo pasado que ya sabemos la tragedia en la que desembocó.

Los agitadores de los medios que repiten las consignas como si de un ritual se tratara, terminan siendo tomados en serio por la mayoría de los consumidores de noticias quizá «porque corren el riesgo de quedar en ridículo» [4. Adorno, Theodor W. Ensayos sobre la propaganda fascista. Barcelona: Ediciones Voces y Culturas, 2001.] Transmiten noticias invocando un falso y burdo sentimentalismo [el cuidado de la salud, la paz en el mundo, la paradójica libertad, el hambre, el clima], inoculando miedo a la población con la intención perversa de hacer mella en quienes reciben el mensaje, ocultando siempre lo esencial de las verdaderas problemáticas de nuestras sociedades y en ocasiones tergiversando u ocultando las verdaderas causas que las generan.

De este modo la actividad de pensar cede paso a la perversidad de clasificar y condenar sin más criterio que la consigna impuesta y asumida.

El pasado reina porque está olvidado, la amnesia social [5. Jacoby, Russell. La amnesia social. Barcelona: 2 culturas, 1977.] es un síntoma, quizá el más relevante de nuestra cultura en todas sus manifestaciones, las del «individuo» y las del colectivo: lo que se olvida, se repite en actos sin armonía ninguna y no siempre sin dolor.

La falsificación de la historia

En el prólogo al libro de Robert Charvin «Rusofobia» [6. Charvin, Robert. Rusofobia. ¿Hacia una nueva guerra fría? Barcelona: El Viejo Topo, 2016.], Michel Collon enumera algunas de las falsificaciones de la historia reciente por parte de los medios de occidente, entre ellos:

■■ La rehabilitación en Ucrania de grupos colaboracionistas con el nazismo alemán, introduciendo pronazis antisemitas en el gobierno surgido del golpe de estado en Ucrania en 2014 auspiciado por EE.UU. y la Unión Europea.

■■ La presentación de la II G.M. como un asunto entre nazis y judíos silenciando el «Plan Ost» con el que Alemania pretendía exterminar al 40% de la población eslava.

■■ La desvalorización de los verdaderos vencedores de la II G.M. y la negación de sus víctimas (unos 23 millones de personas perdió la URSS —a las que cada año desde 1945 se rinde homenaje en las calles de las ciudades rusas—, 20 millones de los fallecidos eran de China) poniendo como acontecimiento decisivo para la rendición alemana el desembarco de Normandía.

Rusia es objeto permanente de una propaganda satanizadora desde al menos finales de los años noventa —en realidad durante todo el siglo XX —cuando el plan de desintegración de su territorio, el expolio de sus riquezas naturales, quedó paulatinamente interrumpido por decisión, no sin obstáculos internos, del gobierno ruso, después de la devastadora y entreguista «perestroika».

Que duda cabe que los EEUU y sus aliados de la OTAN estarían encantados con un Boris Yeltsin en el Kremlin.

La insistente campaña de los medios occidentales contra Rusia facilitó el rápido rechazo de gran parte de los ciudadanos de la Europa occidental promovido por sus gobiernos —no así en el resto del mundo— a la cultura rusa en todas sus manifestaciones desde febrero de 2022: se cancelaron obras de teatro de autores rusos, se suspendieron conciertos, películas, se cerraron las fronteras y bloquearon cuentas de trabajadores rusos, todo con una velocidad pocas veces vista.

Un fantasma recorre Europa: el retorno del miedo a lo «ruso»

Cualquiera que esté mínimamente involucrado en alguna organización social, vecinal, sindical o política sabe que el comunismo como organización efectiva está muerto —al menos eso parece— en occidente. Sin embargo se mantiene vivo en los millones de anticomunistas que permanentemente se dedican a condenarlo. Como dijo alguien que no recuerdo, el comunismo está vivo gracias a la condena que hacen de él los anticomunistas.

¿Qué puede lograrse con prohibir a Tchaikovski o al Ballet Bolshoi ante el conflicto histórico que Rusia y Ucrania mantienen con largos intervalos de convivencia, en este nuevo capítulo que comenzó a finales de lo noventa…?

La desaparición de Rusia y su neutralización es un objetivo prioritario «que Occidente está dispuesto a conseguir siempre y cuando los riesgos que lleva implícita la desaparición de Rusia como estado le resulten asumibles». Podemos imaginar lo que resultaría de ello viendo los efectos que las actuales sanciones impuestas al Estado ruso y a su población tienen para la población de occidente. El coste de estas sanciones lo están pagando los ciudadanos de occidente, a lo que se suma la especulación financiera y comercial de la que son responsables los oligopolios del mercado energético y bancario con la subida del precio del dinero, tarifas eléctricas, alimentos básicos… —recordemos que en Europa las tarifas de la energía eléctrica y el combustible vienen subiendo de forma escandalosa desde al menos 2018.-

Viñeta de El Roto, 24 de Octubre 2022. Diario El País.

El proceso de agresión a la URSS no ha terminado, Rusia es una asignatura pendiente de la guerra fría [7. Fernández Ortiz, A. Chechenia versus Rusia. Prólogo de Serguéi Kará-Murzá. El Viejo Topo, 2003. pp. 139-147.].  El desmantelamiento del estado soviético y la privatización de sus riquezas y empresas a precio de saldo favoreciendo a las oligarquías de dentro de los antiguos países integrantes de la URSS y a las de occidente a través de sus multinacionales (saqueo del que no nos olvidemos, se han beneficiado los habitantes de los países de la Europa occidental con el beneplácito de las nuevas izquierdas fluidas y progresistas pro-otanistas serviles del imperio: petróleo, carbón y gas barato durante un par de décadas…) quiere tener continuidad en la desestabilización del estado ruso al que se suma un nuevo enemigo, a saber el estado chino.

La OTAN una organización militar «defensiva»

La OTAN, una organización creada para la defensa que destruyó Libia, Irak, Yugoslavia… cuyos estados miembros venden armas a Arabia Saudí para la destrucción de Yemen hace casi una década, donde han sido asesinados unos 400.000 yemeníes.

En su página oficial la «Organización del Tratado del Atlántico Norte» se define como una alianza político y militar cuya «finalidad es garantizar la libertad y la seguridad de sus países miembros por medios políticos y militares», dichos medios los define como [8. ¿Qué es la OTAN?. Página oficial: https://www.nato.int/nato-welcome/index_es.html#basic.]:

POLÍTICOS: la OTAN promueve valores democráticos y permite que los miembros se consulten y cooperen cuestiones relacionadas con la defensa y la seguridad para solventar problemas, fomentar la confianza y, a largo plazo, evitar conflictos.

MILITARES: la OTAN tiene un compromiso de resolución pacífica de controversias. Cuando los esfuerzos diplomáticos no dan fruto, la fuerza militar emprende operaciones de gestión de crisis. Estas operaciones se llevan a cabo bajo la cláusula de defensa colectiva del tratado fundacional de la OTAN (Artículo 5 del Tratado de Washington) o por mandato de las Naciones Unidas, por sí sola o en cooperación con otros países y organismos internacionales.

La OTAN lleva años alertando de las intenciones satánicas de Rusia de invadir a sus vecinos europeos. Pero desde su creación son los EE.UU. y sus aliados de la OTAN que bajo el pretexto de la amenaza comunista o terrorista han invadido más de treinta países, entre ellos:

Corea y China 1950-1953, Guatemala 1954, Indonesia 1958, Cuba 1959-1961, Guatemala 1960, el Congo 1964, Laos 1964-1973, Vietnam 1961-1973, Camboya 1969-1970, Guatemala 1967-1969, Granada 1983, Líbano 1983-1984, Libia 1986, El Salvador 1980, Nicaragua 1980, Irán 1987, Panamá 1989, Irak 1991, Kuwait 1991, Somalia 1993, Bosnia 1994, 1995, Sudán 1998, Serbia 1999, Afganistán 1998, Yugoslavia 1999, Yemen 2002, Irak 1991-2003-2015, Afganistán 2001-2015, Pakistán 2007-2015, Somalia 2007-2008-2011, Yemen 2009-2022, Libia 2011-2015, Siria 2014-2016…

Consintiendo y apoyando además el acoso criminal de Israel al Estado y pueblo Palestino.

A eso hay que sumar los golpes de estados promovidos o perpetrados en América: Argentina, Bolivia, Brasil, Chile, Costa Rica, República Dominicana, El Salvador, Guatemala, Haití, Nicaragua, Panamá, Paraguay, Perú [9. Bevins, Vincent. El Método Yakarta. Madrid: Capitán Swing, 2021.].

Mención especial merece el mal llamado «embargo» con el que EE.UU. y sus aliados europeos tienen asfixiado al pueblo de Cuba, bloqueo infame que una y otra vez es rechazado por la Asamblea General de las Naciones Unidas, con declaraciones que finalmente nunca se cumplen, como ocurre con la última resolución de 3 noviembre de 2022:

«La Asamblea General de las Naciones Unidas reiteró este jueves por trigésima vez de forma inequívoca su posición contra el embargo económico de Estados Unidos a Cuba y pidió que se ponga fin a ese castigo unilateral.

La resolución de rechazo obtuvo este año 185 votos a favor, 2 en contra (Estados Unidos e Israel, ) y 2 abstenciones (Ucrania y Brasil)». [10. Resolución de la ONU de 3 de noviembre de 2022: La Asamblea General rechaza por trigésima vez y abrumadora mayoría el embargo a Cuba: https://news.un.org/es/story/2022/11/1516617.]

Cuando EE.UU. y sus aliados consiguen colocar en algún país un gobierno afín a sus intereses, todo perfecto. Le brindarán «ayuda humanitaria» después de destruirlo, paliarán el hambre y la miseria que generan el expolio de sus riquezas y empujarán a sus habitantes a la marginación, la delincuencia, a la huida y a las guerras civiles que por lo general terminan desencadenándose.

El problema surge cuando el «imperio» se topa con un país que no se doblega: automáticamente pasa a formar parte del «eje del mal», ese país soberano comenzará a ser hostigado, se le aplicarán embargos, sanciones económicas, se bloqueará su comercio internacional, se le amenazará explícitamente, etc. buscando que sea el propio pueblo asfixiado el que se movilice para derrocar a su propio gobierno que aparecerá, con la fundamental intervención de los medios de comunicación, como culpable directo de sus desgracias.

Eurocentrismo: «manual de estilo»

Los gran mayoría de europeos aceptan sin cuestionamiento la primacía y por tanto la dependencia cultural y económica de EE.UU.: para las organizaciones occidentales y la población que controlan Rusia no es Europa.

Es totalmente legítimo querer adscribirse a la órbita de un país y su cultura. Un país y sus habitantes pueden desear pertenecer al reino británico o al de la comunidad de los esquimales, pero esa decisión legítima no implica que haya que despreciar y condenar al resto de países.

Eso se manifiesta con claridad en la prensa. Un ejemplo de esta posición de la prensa española ante los EE.UU. fue explícito en la portada de un periódico de tirada nacional el 24 de junio de 2022, cuando se produjo una de las innumerables avalanchas de personas sobre las vallas de la ciudad de Melilla, enclave español en tierras africanas.

Por el aplastamiento provocado por la intervención de los agentes de fronteras murieron al menos 25 personas y un centenar acabó hospitalizada. Unos 200 inmigrantes pudieron cruzar la valla de los 2000/3000 que lo intentaron. Pues bien, el periódico publicó como noticia principal -¿respondiendo al manual de estilo?- la decisión del Tribunal Supremo de los EE.UU. anulando la ley del aborto en ese país y la noticia del trágico suceso en las puertas de España, la ubicó en un mínimo espacio en el faldón de la portada.

Las aspiraciones de los países occidentales al sometimiento del mundo ha sido causa de guerras sangrientas, dos guerras mundiales y otra «fría».

Dicho sometimiento de otros países ha sido condición necesaria para la supervivencia de los países occidentales y sus habitantes y para mantener el llamado «estado del bienestar», rara alianza de palabras. Merced a ese sometimiento, mediante el empleo de su poder militar y económico, Occidente obtiene materias primas que no posee en sus territorios, combustibles y fuerza de trabajo baratas. Para facilitar esto, en no pocas ocasiones, EE.UU. y Europa, a ellos nos referimos al hablar de «Occidente», recurren a la imposición de «democracias coloniales» en los países a expoliar, financiando partidos políticos afines a sus intereses o a través de golpes militares con intervención directa o indirecta imponiendo gobiernos subordinados para perpetrar la explotación: «La explotación del país se realiza con la colaboración de una minoría de la población que se ha enriquecido por ello (…) un proceso como este se inició en Rusia en 1985»[11. Zinoviev, Alexandr. La caída del imperio del mal. Prólogo de Francisco Fernández Buey. Barcelona: Ediciones Bellaterra, 1999, pp. 127-152.]

Pero (casi) todo tiene un límite.

Fomentando la hostilidad entre pueblos vecinos

Hay un «narcisismo de las pequeñas diferencias» que es tolerable, incluso puede llegar a ser saludable para una cultura, para un pueblo, que intentará por ejemplo producir mejor vino que su vecino.

Sigmund Freud [12. Freud, Sigmund. Psicología de las masas y análisis del yo. Buenos Aires: Amorrortu, 2016, p.71.] describió la hostilidad manifiesta y estructural entre sujetos o pueblos semejantes:

«Siempre que dos familias se unen por un matrimonio, cada una de ellas se considera mejor y más distinguida que la otra. Dos ciudades vecinas serán siempre rivales y el más insignificante cantón mirará con desprecio a los cantones limítrofes. Pueblos emparentados se repelen, el alemán del Sur no puede aguantar al del Norte; el inglés habla despectivamente del escocés y el español desdeña al portugués. La aversión se hace más difícil de dominar cuanto mayores son las diferencias y de este modo hemos cesado ya de extrañar la que los galos experimentan por los germanos, los arios por los semitas y los blancos por los hombres de color».

Y esas diferencias y hostilidad hacia otros pueblos se difuminan cuando el interés económico prevalece: se cuestiona en occidente e incluso se prohíbe el uso de vestimenta tradicional propia de una cultura y religión, pero se organiza un mundial de fútbol en un país donde esas vestimentas se imponen o se elige vestirlas: el mercado borra las contradicciones.

Ciencia de la historia y periodismo

Destaca Pierre Vilar que «(…) la historia es el único instrumento que puede abrir las puertas a un conocimiento del mundo de una manera si no `científica´ por lo menos `razonada´» [13. Pierre Vilar. Iniciación al vocabulario del análisis histórico. Barcelona: Crítica, 2003.].

Es innegable el valor de la prensa como fuente historiográfica. El historiador recurrirá a ella necesariamente. Para ello debe operar con prudencia ya que deberá valorar los sesgos ideológicos y propagandísticos del material que recabe. Con esto no descubrimos nada nuevo. Tan solo lo recordamos. No es difícil calibrar a qué intereses responde un periódico, una emisora de radio o televisión. Ningún medio, sea privado o público oculta para quien trabaja.

Por otra parte, no se le puede pedir a un periodista que sea historiador. No es su función. Del mismo modo que no se le puede pedir a un auxiliar de quirófano que coloque un by-pass. La función del auxiliar es velar, con conocimientos sanitarios específicos, por la asepsia del quirófano, la de los instrumentos, el correcto traslado del paciente, asistir al cirujano. Como tampoco la función de un periodista es la de publicar un tratado de historia, — pero qué duda cabe que hay periodistas de prestigio que publican crónicas que están a la altura de un ensayo científico de historia!

Dentro del periodismo hay categorías definidas por la tarea: desde el periodista de campo que recoge información sobre los hechos cotidianos a los divulgadores y presentadores que comunican esa información al público. El trabajo del periodista de campo consiste en recabar los hechos, los acontecimientos del presente de la manera más precisa posible, aséptica, ética, en el terreno donde acontecen los eventos, pero que duda cabe que también debe tener conocimientos de ciencia de la historia para ejercer su función y poder aprehender la realidad que percibe, recordando que no se mira un cuadro pegándose a él.

Al menos así debería constar en la formación académica del periodista.

El historiador recurrirá a ese material periodístico, artículos, crónicas, materia prima indispensable para su trabajo.

Pese al desprestigio permanente en que se sumerge la función periodística, se sigue creyendo de forma acrítica en los medios, a sabiendas de que transmiten en muchas ocasiones información sesgada, como pudimos experimentar durante la presente pandemia. Esto es mucho más evidente y grotesco en el periodismo deportivo.

Quien puede dudar que el periodismo ejerce un semblante de poder!

Pero también sabemos que la tinta de un periódico no siempre es negra, tiene el color del dinero de sus propietarios.

Luego tenemos los «laboratorios de ideas», los grupos de expertos «think tank»:

«Cuando un gobierno quiere divulgar [sus] posiciones echa mano de los medios de comunicación. Cuando quiere crearlas, utiliza a los “expertos”. Los “expertos”, como los periodistas, suelen comer de la mano del poder establecido, así que elaboran las posiciones que se espera de ellos. Para eso existe todo un entramado institucional de fundaciones, universidades, institutos y medios de comunicación, cuyo principal vector es esa servidumbre». [14. Rafael Poch. Preguntas sobre los “expertos”. https://rafaelpoch.com/2019/05/30/preguntas-sobre-los-expertos/].

Destaca Rafael Poch que la mayoría de los laboratorios de ideas están vinculados a intereses particulares, como inteligentemente satiriza El Mundo Today en relación a los supuestos beneficios de la cerveza. [15. El Mundo Today. «Los beneficios de la cerveza» del doctor Miguel Mahou Ámbar, del Instituto Heineken, podría no ser imparcial»: https://www.elmundotoday.com/2022/07/el-articulo-los-beneficios-de-la-cerveza-del-doctor-miguel-mahou-ambar-del-instituto-heineken-podria-no-ser-parcial/]

La superioridad económica y militar de la OTAN y sus socios de la Europa del oeste respecto a gran parte de países del mal llamado «tercer mundo» es irrefutable, pero eso no le da derecho a invadir sus territorios, bajo falsas amenazas («armas de destrucción masiva»), financiar golpes de estado e imponer gobiernos afines que posibiliten el robo de sus riquezas.

Comprender el pasado, señala Pierre Vilar, es dedicarse a definir los factores económicos, culturales de una sociedad determinada; descubrir sus interacciones, sus relaciones de fuerza, y desvelar tras los textos, los archivos… las pulsiones e intereses (conscientes e inconscientes) que dictan los actos que la constituyen y van moldeando a los ciudadanos que la componen. Esa es la función del historiador.

Conocer el presente equivale, mediante al aplicación de los mismos métodos de observación, de análisis de crítica que exige la historia, a someter a reflexión la información deformante que nos llega a través de los medios. Esa tarea implica a las ciencias de la información.

Se manifiesta un empeño grotesco de retirar a Rusia del seno de la «historia universal» o incluirla en el catálogo borgiano de la infamia universal. O incorporarla al Occidente imperialista pero sin historia alguna. Entiéndase por ello, la operación «Perestroika»: «No eres de los nuestros, ni lo serás nunca, solo tus riquezas serán nuestras, europeizaremos tus materias primas, para nuestro beneficio». 

Señala el historiador A. Fernández Ortiz evocando a Hegel:

«Para Hegel, la civilización universal es la cultura europea occidental y en concreto el mundo germánico (hoy ni siquiera eso, agregado mío). Todas aquellas sociedades que se encuentran fuera de la trayectoria histórica-geográfica que representan Grecia, Roma y el mundo germánico, se encuentran fuera de la civilización universal»

Y continúa:

«La única opción para los que se encuentran `fuera´ es tratar de incorporarse a ella repitiendo el camino trazado por los que están `dentro´» [16. Fernández Ortiz, A. Octubre contra El Capital. El Viejo Topo, 2016, p. 78.]

El gobierno de Europa reside, al menos oficialmente, en Bruselas. Las viejas capitales de la vieja Europa hoy parecen conformar un amorfo «mercadillo». Cada cuatro años o menos, sus países cambian de representantes, cada uno de los puestos del mercadillo europeo ofrece sus «productos» (los del sur playas, naranjas y servicios…); los partidos que se alternan en el poder son lamentables y prebendarias franquicias que no cesan de cambiar de nombre en «coaliciones» con rimbombantes y grotescas etiquetas por las exigencias electoralistas, que se suman y pretenden ser alternativas a los partidos «tradicionales» de las democracias neoliberales y no son más que sostenedores de estos.

Cada una de esas franquicias electorales en coalición junto a los partidos tradicionales tienen al servicio medios, prensa, TV, empleados enajenados bajo el reino de la necesidad y el servilismo, lejos, muy lejos del ideal de la ética, del imperativo categórico del periodismo… 





Regreso a Rusia: abril-mayo 2022

Primera cancelación: «la pandemia»

En abril de 2020 tenía planificado regresar a Rusia después de tres años de la última visita, treinta y dos años de la primera, cuando pertenecía a la Unión Soviética.

La ruta contemplaba varias etapas. En la primera llegaría a Moscú en avión, recorrería la ciudad unos diez días, asistiría a los actos del 1º de mayo [álbum], al desfile del Día de la Victoria del 9 de mayo [álbum] y al día siguiente viajaría en tren a Rostov del Don.

En Rostov del Don [álbum] comenzaba la segunda parte del viaje. Después de visitar la ciudad un par de días, viajaría en otro tren hasta la ciudad costera de  Taganrog, a unos 80 km., la última ciudad rusa fronteriza con el Oblast de Donetsk. 



Me acercaría a la frontera, al Mar de Azov, intentaría comprobar la situación de la zona, sabiendo de los graves conflictos civiles y militares de las últimas décadas, visitaría la casa natal [álbum] de Antón Chéjov Esto me llevaría unos cuatro o cinco días para luego retornar a Rostov del Don.

El tercer momento del viaje lo reservé para recorrer la República de Crimea [álbum], península que en 2014 había decidido unirse a la Federación Rusa. Para ello tomaría otro tren desde Rostov del Don a Kerch pasando por Krasnodar, donde estaría al menos un día. Este tramo del viaje tenía un gran aliciente: el de poder cruzar el puente Tamán-Kerch, un puente de 20 km. de longitud que Rusia construyó en 2017 [Documental de ARTE-TV] y cuya vía férrea -inaugurada en 2019- atraviesa el estrecho que une el Mar de Azov con el Mar Negro.  

El cuarto y último momento del viaje me llevaba a tomar un avión desde Simferópol, capital de Crimea, con destino a Minsk, haciendo escala para dirigirme a Chisináu, capital de Moldavia. No había ni hay posibilidad de llegar a Moldavia desde Rusia atravesando Ucrania desde por lo menos el año 2010.

En Chisináu un tren me llevaría rumbo a Tiraspol, capital de la «desconocida» Transnistria. El territorio de la República Moldava Pridnestroviana, que así se llama, se recuesta  sobre la orilla izquierda del río Dniéster, y su bandera verdirroja porta una hoz, un martillo y una estrella de cinco puntas. Este pequeño estado, que fue motivo de burla el último año en algunos medios españoles cuando su principal equipo de fútbol viajó a Madrid para disputar un partido, no es reconocido a día de hoy, a excepción de algunos pocos países, entre ellos AbjasiaOsetia del Sur y la República de Nagorno-Karabaj, pero mantiene de facto estrechos vínculos con la Federación Rusa. 

La ruta original, tomando como punto de partida Moscú y de llegada Tiraspol, era aproximadamente ésta:

En marzo de 2020 los gobiernos de gran parte del planeta cancelaron los desplazamientos y mi viaje quedó suspendido.

Dos años después pensé en retomar el proyecto del viaje, pero con otra configuración, algo más reducida. La fecha de salida también sería a finales de abril. La compañía Aeroflot, que me había conservado los billetes, me dio la posibilidad de viajar a Moscú el 24 de abril de 2022. Organicé mis tareas, mi trabajo y confirmé la salida del vuelo.

subir

Segunda cancelación: «la guerra»

A los acontecimientos que se desencadenaron la última semana de febrero de 2022 siguieron sanciones y restricciones a Rusia, entre ellas el bloqueo -por parte de EE.UU., la UE y la mayoría, no todos, de los países aliados a la OTAN- a sus compañías aéreas. Inmediatamente recibo notificación de Aeroflot informándome que mi vuelo obviamente había sido cancelado. Consulté inquieto a los agentes telefónicos de la compañía: estos me sugirieron que valorara la posibilidad de llegar a Moscú a través de otras líneas aéreas y otras rutas.  

Una de esas rutas era la de BelgradoMinsk, dado que desde esta ciudad se puede llegar en avión a Moscú; otra posibilidad era la vía Estambul, también por Minsk, a través de Turkish Airlines.

Ante mi sorpresa comprobé que había más opciones para llegar a Rusia [Armenia, Ubezquistán, Azerbaiyán, Kazajistán, Teherán, Dubai, Israel -los vuelos desde Tel Aviv no se interrumpieron y se mantienen a día de hoy…], pero me decidí por la opción Estambul.

Turkish Airlines me informó que los vuelos durarían unas dos horas más desde Estambul debido a las restricciones del tráfico aéreo por el conflicto militar, que obligan a dar un rodeo al Mar Negro.

Previamente había consultado con el Consulado de Rusia en Madrid -días antes de que el gobierno español ordenara la salida de su cuerpo diplomático-, sobre los requisitos sanitarios de entrada y seguros necesarios para entrar al país. El visado no es necesario desde hace años para quienes tenemos la nacionalidad argentina. 

Seguro de viaje: «las sanciones»

Un trámite que debía resolver era la cuestión del seguro de viaje obligatorio, requerido habitualmente para cualquier vuelo y que las aseguradoras de la U.E. ya no contratan para viajar a Rusia.

Por tanto me puse en contacto con empresas rusas pero tampoco era factible formalizar la póliza ya que no hay forma de realizar el pago por transferencia -otra de las consecuencias de las sanciones impuestas.

Ante esto recurro a una amiga rusa que actualmente vive en San Petersburgo. Ella realizó el pago -unos 1.100 rublos, al cambio de ese día unos 12 €, que es lo que cuesta habitualmente un seguro de viaje-, de este modo puede contratar y recibir mi póliza por correo electrónico. Cuando me reencontré con mi amiga en Moscú, ¡después de cinco años! -nos habíamos conocido en un viaje anterior en Novosibirsk, la capital de Siberia- le devolví su dinero y entre la alegría del reencuentro, obviamente comentamos las lamentables y problemáticas situaciones que generaban las masivas «sanciones».

Finalmente pude viajar a Moscú vía Estambul con Turkish Airlines la última semana de abril. Un vuelo que en total y debido al rodeo mencionado por las restricciones del espacio aéreo y los transbordos en los aeropuertos, que fueron tres, duró poco más de 28 horas desde Madrid.

De este modo, logré regresar a Rusia después de mi último viaje en 2017 -mis visitas al país donde «todo es posible» [1. Santos, Anselmo. En Rusia todo es posible. Relatos de la desmesura. Vigo: Trymar, 2003.] suman una docena, sus trenes del ferrocarril Transiberiano  me permitieron atravesar, Mongolia, China, hasta llegar a Pyongyang…

La ruta de 2022, con un obligado itinerario que me llevó por Belgrado, Minsk, Sochi, Estambul, fue aproximadamente ésta: 

Durante más de cuatro semanas y unos 16.000 km. en total, salvo visitar Transnistria, el proyecto de viaje de 2020 pude cumplirlo, además en unas circunstancias que lo hicieron aún más intenso y con muchos más interrogantes:

¿cómo sería la vida cotidiana del pueblo ruso ante la situación de enfrentamiento con la Europa del oeste, con EE.UU. y sus aliados?; ¿cómo le afectarían las sanciones y bloqueos?…

Días antes de viajar algunos países expulsaban a los diplomáticos rusos, otros bloqueaban cuentas de los trabajadores rusos residentes en países de la U.E., estudiantes de intercambio académico se marchaban de las universidades rusas, otros gobiernos prohibían las actuaciones del Ballet Bolshoi, se cancelaban películas de Tarkovski, seminarios sobre Dovstoievki

De las muchas preguntas que yo mismo me hacía por la situación, de algunas intuía las respuestas: después más de una docena de visitas a este extenso país y de conocer someramente unas cuantas de sus ciudades y pueblos -recorridos que mayormente hice en trenes-, y de haber leído algo de su historia, creo tener un torpe esbozo sobre el carácter del pueblo ruso, de cómo maneja el tiempo y las dificultades, quizá de forma diferente a la de otros pueblos que tienen ya sea por olvido, necesidad o imposición, una presencia menor de su propia historia.

La ola de «rusofobia», que siempre ha estado latente en una pequeña pero importante parte de occidente, había despertado. Algunas personas cercanas a mi me enviaron mensajes e hicieron comentarios cuestionándome cuando supieron de mi viaje, que por cierto había organizado discretamente, como habitualmente hago cuando proyecto un viaje como este.

Otras, al regresar a mis rincones temporales, me miraron con recelo…

subir


Llegada a Moscú

«Comprender» es imposible sin «conocer». La historia debe enseñarnos, en primer lugar, a leer un periódico.

Pierre Vilar, Iniciación al vocabulario del análisis histórico.

Aeroexpress: Aeropuerto de Vnokovo – Estación Kievskaya


Día del Trabajo, 1º de mayo

Sin duda el 1º de mayo representa para mi una de las fechas mas importante del año. Es así desde mi infancia, tiempo antes de empezar a trabajar en mi adolescencia. Eso se lo debo a mi padre, que no pudo terminar la educación primaria. Era albañil desde los 12 años, peón en ese momento, cuando fallecieron con meses de diferencia sus padres, mis abuelos de Santiago del Estero [una provincia árida, pobre y sofocante producto de la deforestación de las empresas que durante el siglo XX se llevaron los troncos de quebracho a Inglaterra, tarea de despojo de la que se encargaba la empresa británica «La Forestal»: las vías de los ferrocarriles británicos descansaban sobre los rojos y duros durmientes hechos con los árboles del norte argentino, el Chaco, que documenta en parte la película Quebracho], y en varias ocasiones ya de adulto, delegado sindical de las obras en las que trabajaba y generalmente le explotaban.

Gracias a mi padre esa fecha, el Día del Trabajo, siempre fue importante en mi casa de la infancia en San José, un barrio obrero de Temperley, localidad a unos 20 km. al sur de Buenos Aires donde hice la escuela primaria y la secundaria. La casa la construyó mi padre en un terreno baldío, era lo habitual para quienes llegaban del interior del país a los suburbios de la capital, en lotes con calles de tierra, a veces sin agua, otras sin luz, pero siempre sin cloacas. Vivíamos cerca de la avenida Pasco y del arroyo Las Perdices, un barrio tristemente célebre por un episodio infame ocurrido, entre otros tantos en la Argentina, en los años setenta: «la masacre de Pasco».

Rusia siempre estuvo muy presente en la Argentina debido quizá a la cantidad de inmigrantes que llegaron al Río de la Plata desde al menos 1881 en diferentes momentos —Argentina alberga la mayor comunidad rusa de Sudamérica, actualmente unos 350.000 descendientes— y en mi casa por las situaciones que mi madre andaluza había vivido, ella si pudo terminar la escuela primaria en Sevilla, y que relataba de la guerra civil española —mi madre nació en 1924 en Córdoba y emigró a Sudamérica en 1956 huyendo en un barco de la silenciada hambruna andaluza [2. Barnés Héctor G. (2021, 16 de febrero). La hambruna española que fue borrada de la historia. Diario El Confidencial. https://www.elconfidencial.com/cultura/2021-02-16/gran-hambruna-espanola-muertos-guerra_2945088/.] en la que vivía junto a su familia e intentar desde allí poder ayudar con algún envío de dinero, en aquella época el peso argentino ¡tenía valor! En Buenos Aires se unió a su hermana mayor que junto a su marido, mi tío Paco y sus dos hijos pequeños habían viajado un par de años antes. Quedaron en Sevilla cuatro hermanas de mi madre y mis abuelos, a los que nunca llegué a conocer. Ambos eran cordobeses, mi abuelo había nacido en Montoro y mi abuela en Almodóvar del Río. 

Mi madre me hablaba de la Unión Soviética, de la ayuda que los rusos dieron a los republicanos durante la guerra y de las Brigadas Internacionales [3.Kowalsky, Daniel. La Unión Soviética y la Guerra Civil Española. Prólogo de Stanley G. Payne. Barcelona: Crítica, 2004.][4.Rybalkin, Yuri. Stalin y España. Prólogo de Ángel Viñas. Madrid: Marcial Pons, 2008.]

No poco le debo a mis padres. 

En los años ´70, durante primera dictadura militar argentina que recuerdo con bastante claridad, tenía unos catorce años cuando el último golpe de estado, escuchábamos en casa a través de un transistor de onda corta las noticias de Radio Moscú! Todos los medios nacionales estaban lógicamente intervenidos. Alguna vez llegué a pensar que ese recuerdo era un «recuerdo encubridor», sobre todo cuando empecé a leer a Freud: ya sabemos que cuando uno cree saber «algo» encuentra ese «algo» en todas las situaciones, pero no es así: las transmisiones eran reales, mágicamente reales, emisiones en castellano del Komsomol [5.Organización Juvenil del P.C.U.S., creada en 1918 y disuelta en 1991.] Tiempo después desde esa misma emisora moscovita nos llegarían sobre la «Guerra de las Malvinas». Noticias que los medios argentinos obviamente ocultaban.

Las «noticias» que los medios difunden por lo general, no es información, es mercancía. [Ya no sorprende, pero ¿tendrá alguna explicación, que la masa por lo general sospeche de lo «verdadero», que en ocasiones es evidente, y asuma lo «falso» con tanta docilidad?: ¿la post-modernidad habrá acabado con el pensamiento crítico?] Sabemos que quienes se encargan de difundir las «noticias-mercancías» no son más que vendedores de crecepelo, aún así se les cree, otra cosa es el periodismo, profesión devaluada como tantas otras hoy día.

Radio Moscú nos contaba algo distinto sobre Malvinas. La guerra estaba perdida desde un principio, la propaganda de la Junta Militar insistía en lo contrario. ¿De ganar la guerra los militares hubiesen seguido en el poder?

Mi padre falleció poco antes de aquello. Había sido detenido en esa década y preso al menos en tres ocasiones; la última vez meses antes de morir con menos de cincuenta años, en octubre del año anterior. 

Vivir el 1º de mayo en Moscú -¡quién me lo hubiera dicho!- en la Plaza de la Revolución, entre banderas rojas, frente al Teatro Bolshoi y junto a la estatua de Karl Marx aumentaba para mi el valor del acontecimiento. 

1º de mayo : Plaza de la Revolución, Moscú.
Discurso de Guennadi Ziuganov, Secretario del PCFR. Diputado de la Duma Estatal.

subir


Cementerio Novodévichi, Moscú

El 2 de mayo de 2022 visité el Cementerio Novodévichi [página oficial] ubicado junto al Monasterio de Novodévichi que a su vez alberga la Catedral de Nuestra Señora de Smolensk (S. XVI).

​El cementerio se inauguró en 1898 y acoge las tumbas de personajes de la cultura, el arte, la ciencia, la política rusa, soviética… Pasear por sus callejuelas es un encuentro con la historia. Visitarlo puede llevar un par de días.

El cementerio es frecuentado por estudiantes, artistas, profesores, familias: es una biblioteca, es un museo que nos obliga a estudiar la vida de sus ilustres moradores. 

Pude contemplar las tumbas de quienes más admiro buscando en el mapa que ofrecen en la oficina de la entrada, entre ellos: los escritores y poetas Mijaíl Bulgákov, Antón Chéjov, Nikolái Gógol, Vladímir Mayakovski; junto el maestro del cine Serguéi Eisenstein, al cofundador del Teatro de Arte de Moscú, Konstantín Stanislavski

Del campo de la historia política y social de la última centuria me encontré la tumba de Andrei Gromiko ministro de Relaciones Exteriores de la URSS en los años ochenta, la del locutor de radio Yuri B. Levitán y la tumba del muy citado pero intencionadamente poco conocido Piotr Kropotkin, pensador imprescindible, inquieto y brillante geógrafo.

Sigue la lista con Viacheslav Mólotov que además de dar su apellido sin su consentimiento al famoso explosivo de fabricación artesanal -el apodo tiene origen en un sarcasmo de los finlandeses tras la entrada de los soviéticos en su territorio en 1939- fue un político brillante y un negociador amable pero irreductible; la historiadora e implacable francotiradora Lyudmila Pavlichenko [la editorial Crítica ha publicado sus memorias en 2019], y una pequeña estatua blanca que señala que ahí descansa Nadezhda Alilúyeva, segunda esposa de Iósif Stalin.

También están las tumbas de los físicos [me interesa la tecnología industrial, desde mis estudios secundarios en escuelas técnicas en Buenos Aires y otros ochos años en la Universidad Tecnológica de Avellaneda, además de mis trabajos como obrero y técnico luego en refinerías, astilleros, en el ferrocarril…] Piotr Kapitsa, premio Nobel de Física en 1978, el también físico Serguéi Kapitsa y el célebre ingeniero aeronáutico Andréi Túpolev, quien tuvo una militancia política oscura: se le vinculó con un partido nazi-soviético y por ello fue llevado a prisión unos siete años, desde donde siguió trabajando en sus diseños aeronáuticos para la «Madre Patria».

También está la tumba del brillante psicólogo Lev Vygotski, de quien estudié sus teorías sobre el desarrollo en segundo o tercero de psicología en Madrid, ciudad a la que llegué en 1990. 

Del campo de la música la lista es muy amplia. Pude ver las tumbas de Serguéi Prokófiev, Mstislav Rostropóvich, Aleksandr Skriabin (al que escucho con frecuencia ya que me evoca la primera vez que a través los dedos de mi hija al piano conocí una obra suya), Dmitri Shostakóvich… 

Así como los rincones que albergan los restos de personajes que considero nefastos para la historia reciente de Rusia y del mundo, tales como el de Yeltsin, el de Jruschov. También está la tumba de Raísa Gorbachova, esposa de quien fuera ariete del desastre soviético de los noventa: Mijail Gorbachov.

subir


Metro de Moscú

subir


Ensayo del desfile del Día de la Victoria: 4 de mayo de 2022

El de este año sin duda era un desfile especial. Las circunstancias de la guerra obligaban a que lo fuera. Es habitual la realización de tres ensayos antes del desfile del día 9 de mayo por las calles de Moscú. El primer ensayo de este año fue el día 27 de abril. El segundo, que pude presenciar, fue el miércoles 4 de mayo, ambos a las diez de la noche. 

Sobre las seis de la tarde las máquinas de guerra fueron llegando lentamente a las calles.  Verlas, sabiendo que las que contenían carga se estaban utilizando a unos centenares de kilómetros, me estremeció.

El olor del combustible quemado me entristeció.

Los acorazados estaban a pocos metros de mi, podía tocarlos, no parecían reales, salvo por el ruido de los motores y el golpe ronco de las orugas de hierro sobre el asfalto.

subir


Lugares de Moscú

A los pocos días de regresar a mis rincones habituales, un parroquiano, que no había visitado Rusia jamás, me comentó en la barra de un bar sobre la escasez de alimentos en los mercados rusos y las detenciones masivas en las calles  en protesta contra el gobierno. Agradeciéndole la información le comenté que estando allí no veía la hora de volver para que me informara de segunda, tercera o quinta mano sobre la situación de la vida cotidiana en el vecino país, cercano geográficamente pero desconocido para la mirada de un europeo del lejano oeste…

subir


Desfile Día de la Victoria: 9 de mayo de 2022

En las calles de las ciudades de Rusia, desfilan cada año, los descendientes de los muertos por la invasión nazi 1941-1945…

subir


Rostov del Don

subir


Taganrog, Casa Natal de Antón Chéjov, Mar de Azov

subir


República Autónoma de Crimea

La visita a la península de Crimea era y fue una etapa clave de mi viaje. Por su significado histórico y político, acentuado por los acontecimientos de la última década.

La península de Crimea ocupa una superficie cercana a la de Bélgica, unos 27.000 km2., con 2.700 km. de costa sobre el Mar de Azov y el Mar Negro. Antes de viajar leí algunos textos de historiadores reconocidos, entre ellos uno de Josep Fontana, donde señala, refiriéndose a los intentos históricos de cambiar el dominio imperante, que:

«Uno de esos intentos de transformación social, que se inició en Rusia en 1917, ha marcado la trayectoria de los cien años transcurridos desde entonces. La amenaza de subversión del orden establecido que implicaba el modelo revolucionario bolchevique determinó la evolución política de los demás, empeñados en combatirlo y, sobre todo, en impedir que su ejemplo se extendiera por el mundo. Fascismo y nazismo, por ejemplo, nacieron como respuestas a la amenaza comunista, proponiendo como alternativa modelos de revolución nacionalista que no pasaron de formulaciones retóricas» [6. Fontana, Josep. El siglo de la revolución. Barcelona: Editorial Crítica, 2017, p. 11]

Y yo añadiría que esas «respuestas» trajeron no pocos conflictos, tragedias,  y guerras en este siglo y el anterior y otra veintena que actualmente están en sangriento vigor. No siendo éste el lugar para enumerarlos, me limitaré al conflicto que compete a Crimea, territorio que la U.R.R.S. cedió a Ucrania bajo el gobierno de Nikita Jrushchov en 1954.

Lo que no sale en los medios «no-existe».

George Kennan, quien fuera embajador estadounidense en la U.R.S.S. en 1952 y en Yugoslavia entre 1961 y 1963, advirtió a finales de los noventa de los efectos negativos que contra los intereses de su país tendría la expansión de la OTAN hacia las fronteras de Rusia.[7.Ibídem, p.585.]

En febrero de 2014, el gobierno del presidente electo de los EE.UU., Barack Obama, premio Nobel de la Paz en 2009, apoyó un golpe de estado en Ucrania -auspiciado o al menos tolerado por sus socios de la OTAN– que derrocó al gobierno del también presidente electo Viktor Yanukovich. En su lugar los golpistas colocaron un régimen de extrema derecha declarado antirruso. Famosa es la frase que se filtró de una conversación entre Victoria Nuland, en ese momento responsable de la política exterior para asuntos europeos y euroasiáticos de los EE.UU., actualmente subsecretaria de estado y Geoffrey Pyatt, entonces Embajador de los EE.UU. en Kiev. [8.Chiacu, Doina. Mohammed, Arshad. (2014, 7 de febrero). Audio filtrado revela vergonzosa conversación de embajador de EEUU en Ucrania. Agencia Reuters. https://www.reuters.com/article/portada-ucrania-eeuu-audio-idLTASIEA1602020140207] 

Estos infames sucesos nos lo recuerda en una conferencia reciente Juan Antonio Zorrilla.[9.Zorrilla, José A. (2022, 5 de mayo). Ucrania: ¿cómo hemos llegado a esta situación? San Telmo Museoa. Video YouTube: https://www.youtube.com/watch?v=fQKFa-HNjSc]Consumado el golpe de estado en el gobierno central de Kiev, las provincias del este de Ucrania, mayoritariamente rusófonas, comenzaron a exigir sus respectivas autonomías. Así como en la península de Crimea por iniciativa popular se puso en marcha un referéndum que dio como resultado la declaración de la autonomía y la incorporación de la declarada República de Crimea a la Federación Rusa.

El golpe del 2014 reavivó un conflicto civil y militar que explotó en febrero de 2022 y tomó por sorpresa a gran parte de occidente, dado que dicho conflicto estaba sometido a interesado ocultamiento en los medios.

En 2022 la población de Europa occidental descubría un territorio nuevo: el «Donbás» del que la mayoría no tenía noticias de su existencia, así como tampoco de la ciudad de «Mariúpol» -si meses antes se hubiese hecho una encuesta en alguna capital europea o estadounidense consultando sobre la existencia y ubicación de esos enclaves, probablemente el resultado los daría como cercanos a alguna playa del Caribe- como tampoco muy pocas personas sabían de Transnistria, menos aún de Kaliningrado, antes Königsberg, ciudad donde nació Immanuel Kant, que alberga una universidad que lleva su nombre. Recuerdo vagamente la cara de asombro de algunos cercanos míos, cuando a principios de 2020 comenté que iba a viajar a Transnistria, la República de Pridnestovie, al otro lado del río Dniéster… Sabemos que aquello que no aparece en los medios no existe para la mayoría de la población: (por ejemplo, la masacre de Yemen).

Otro personaje a considerar es Zbigniew Brzezinski, quien fuera consejero nacional de seguridad del Presidente James Carter, y «uno de los estrategas imperiales mas conocidos de Estados Unidos».[10.Poch-de-Feliú, Rafael. Blog La Vanguardia: https://blogs.lavanguardia.com/paris-poch/2017/06/08/brzezinski-gigante-se-nos-fue-43960/]

En 2016 publicó un artículo donde alertó que

«(…) EE.UU.  sigue siendo la entidad política, económica y militarmente más poderosa del mundo, pero, dados los complejos cambios geopolíticos en los equilibrios regionales, ya no es la potencia imperial global» [11. Brzezinski, Zbigniew. Toward a global realignment. The American interest. Volumen 11, Número 6. 2016, 17 de abril. Hacia un realineamiento global – The American Interest (the-american-interest.com)].

Añadiendo que ante los dos estados potencialmente amenazantes, a saber China y Rusia, le correspondería a los EE.UU. diseñar una política en la que al menos uno de esos dos estados potencialmente amenazantes se convirtiera en un «socio» y contener al rival más probable para extralimitarse: Rusia.

Rusia desde su posición de debilidad después de la implosión de la URSS, y del saqueo de sus recursos naturales y públicos que provocó que su población cayera en la pobreza, sorprendentemente resurgió -yo diría más rápido de lo esperado, tal como he podido comprobar en cada viaje que he realizado al mejorar notablemente sus infraestructuras y ciudades- y para que no le sucediera lo que a otros países del «eje del mal», es decir, la destrucción total, comenzó a desarrollar armamento nuclear, a costa quizá de sacrificar la mejora de servicios necesarios para la población. En esta última década fortaleció sus defensas militares, y se vio obligada ante las señales insistentes que desde EEUU, la OTAN y sus aliados le llegaban, a entrar en una Nueva Guerra Fría, quizá indeseada.

La OTAN planeaba después del cambio de gobierno en Kiev instalar sus bases en Crimea. Pero en 2014 la mayoría de la población de la península declaró su soberanía y retorno a territorio ruso [12. Poch-de-Feliú, Rafael. La invasión de Ucrania. Contexto, 2022, p. 81].

El puente de Kerch

Rusia construyó entre 2014 y 2018 un puente de 19 km. sobre el estrecho de Kerch para conectar Crimea con el Krai de Krasnodar. Se trata de una conexión de Crimea con la Rusia continental por tierra. en 2019 se inauguró la vía ferroviaria que conecta Crimea con Moscú.

Viaje a la República de Crimea

subir